El extraordinario departamento Porsche Classic no deja de sorprendernos con las piezas que ofrece para que los propietarios de un legendario modelo de la firma de Zuffenhausen puedan mantenerlo como el primer día. Ahora estos chicos han comenzado a fabricar una pieza bastante solicitada y que no se encontraba en su extenso catálogo, pieza que no es otra que un cárter de magnesio especialmente concebido para los míticos ‘nueveonce’.
La reedición de este componente vital para los motores bóxer de la firma de Zuffenhausen por parte de Porsche Classic va a permitir a los propietarios reemplazar dicha pieza en el caso de que rompan la carcasa de su motor, de manera que no tendrán que repararla. Y es que esa operación rara vez se hacía a la perfección incluso en talleres especializados.
Porsche Classic reedita esta pieza para modelos de entre 1964 y 1989
Porsche Classic va a fabricar cárteres para los bloques con 2.0, 2.2, 2.4 y 2.7 litros, motores que fueron equipados por los Porsche 911 y Porsche 912 de las series F y G. Eso comprende todas las versiones que fueron ensambladas entre los años 1964 y 1989, de manera que todos sus propietarios estarán mucho más contentos.
“Esta reedición cierra otra brecha en nuestra gama de repuestos, haciendo posible construir motores completamente nuevos para la mayoría de los modelos 911 clásicos”, dijo Ulrike Lutz, directora de Porsche Classic. “Hay mucha demanda de nuestros clientes de componentes de motor fieles a los originales como este”.
Inspirados en los originales y con tecnología del Grupo C
El lanzamiento de este nuevo cárter de magnesio sigue a la reedición de los cárteres de aluminio que Porsche Classic ya ofrece para los 911 con motores más poderosos lanzados en la década de los años ‘80. Para crear estas piezas de aluminio los ingenieros de la firma de Zuffenhausen se inspiraron en el famoso motor de carreras utilizados por los Porsche 962 que dominaban en el famoso Grupo C. Para fabricarlos se buscaron los dibujos originales en el archivo de la marca, además de volver a llamar a antiguos ingenieros y personal que trabajó antaño en este departamento. Y la misma técnica utilizó Porsche Classic cuando se puso manos a la obra para desarrollar este nuevo cárter de magnesio.
Tomaron como punto de partida la versión más moderna de cada cárter original, que fue debidamente escaneada para desarrollar un molde para poder emplear el método de fundición en arena. Una vez creada la pieza, Porsche Classic la manda a una máquina CNC de cinco ejes para dejar impoluto dicho componente para el motor bóxer de todo ‘nueveonce’.
Porsche Classic probó su nueva pieza en un 911 Carrera RS 2.7
Incluso los chicos de Porsche Classic se tomaron la molestia de probar este componente en el mundo real. Y para ello equiparon uno de sus nuevos cárter de magnesio en la versión más potente del motor bóxer de la época, que correspondía al bloque empleado por los Porsche 911 Carrera RS 2.7, capaz de proporcionar 210 CV de potencia. Dicha pieza se sometió a todo tipo de pruebas de resistencia en banco para luego desmontarlo y examinarlo a fondo.
Porsche Classic cuenta en la actualidad con cerca de 80.000 piezas de repuesto, aunque ese número no va a parar de crecer con el tiempo. Tanto es así que dicen que se han puesto manos a la obra para fabricar otras réplicas de cárteres para diferentes generaciones del 911.
