La todavía breve historia de Fisker, fundada en 2007, ha estado repleta de idas y venidas. Su primer modelo, el Karma, fue una especie de coupé de cuatro puertas (o sedán deportivo, como cada cual prefiera) propulsado por un sistema híbrido enchufable. No llegaron a fabricarse 2.500 unidades antes de que la marca sufriese graves problemas económicos, hasta la dimisión de su CEO y fundador, Henrik Fisker, en 2013.
La firma Fisker sería reflotada poco después tras ser adquirida por una empresa china, pero el daño a su imagen ya estaba hecho. Reposicionarte y, sobre todo, recuperar la confianza de tus potenciales clientes es muy complicado ante una situación tan traumática y mediática como esta. Más aún si tu intención es entrar en el segmento Premium de los modelos 100 % eléctricos, donde hay decenas de propuestas, sobre todo, en el segmento SUV.
En este sentido, hay que admitir que Fisker lo ha hecho de fábula con el Ocean, un SUV de lujo de 4,77 metros de longitud destinado a competir con los BMW iX, Audi Q8 e-tron o Polestar 3, entre muchos otros. Primero, porque su diseño se sale fuera de lo común, con unas proporciones poco habituales. Segundo, porque se habla de un precio claramente inferior al de sus competidores (al menos, en el mercado americano; Europa es otra historia). Y tercero, porque su rango les deja a todos en clara evidencia.
El Fisker Ocean tiene una autonomía increíble
La marca de origen americano acaba de confirmar la cifra de autonomía WLTP del Ocean, que ha alcanzado las 440 millas, o lo que es lo mismo, 708 kilómetros. Hasta ahora, solo unos pocos elegidos alcanzaban o superaban los 600 kilómetros, tales como el Mercedes EQS 580 (600 km exactos) o el BMW iX xDrive50 (629 km). Un Tesla Model X, en su configuración más eficiente, se queda en 576 kilómetros en ciclo combinado, si bien el modelo de la empresa de Elon Musk es notablemente más grande y pesado que el Ocean.
Dicha cifra corresponde al Ocean Extreme de 558 CV, una versión tope de gama que tiene una batería más grande que la instalada en los modelos básicos. Fisker aún no ha confirmado los datos WLTP para el resto de su oferta, aunque también se espera una mejora de en torno al 15 %, por lo que el intermedio Ultra también se posicionará por encima de sus competidores.
No obstante, los datos WLTP referidos a coches eléctricos aún distan de ser del todo fiables para hacernos una idea de la realidad. En las próximas semanas se deberían de publicar los datos EPA para el mercado estadounidense, que tienden a ser más cercanos a la realidad y nos servirán para hacernos una idea de lo que ofrecerá el Ocean Extreme.