En el Lancia Pu+Ra HPE están las claves que definirán los modelos que la casa italiana lanzará al mercado en la próxima década. No obstante, se trata de un prototipo futurista, meramente conceptual; un conjunto de ideas que hay que interpretar cuidadosamente.
Y junto con las primeras imágenes del Lancia Pu+Ra HPE, llega un interesante listado de tecnologías, conceptos y siglas con los que los responsables de la firma italiana pretenden dar a sus vehículos esa personalidad distintiva que haga que Lancia vuelva a hacerse un hueco en el mercado.
Así es el Lancia Pu+Ra HPE por fuera
Comenzando por el exterior, encontramos claras referencias al mítico Stratos (1973), especialmente en la zaga. Buena parte de la culpa la tiene el uso de “formas elementales icónicas, como el círculo o el triángulo” que configuran las líneas maestras del prototipo y que servirán para perfilar la imagen de todos los nuevos modelos de Lancia.
No obstante, Lancia menciona otros modelos como fuentes de inspiración. Por un lado, las líneas curvas de los Aurelia (1950) y Flaminia (1957) aportan la idea de “volúmenes fluidos” y sensación aerodinámica, si bien no hay una traslación directa de las líneas maestras de sus carrocerías en la del Pu+Ra HPE, como sí la hay del Stratos.
Por otro lado, las líneas más rectas del Lancia Beta HPE y su luna trasera con la reinterpretación de la “persiana veneciana” tienen un claro guiño en la luna trasera serigrafiada del Pu+Ra HPE.
Por cierto, las siglas HPE, estrenadas precisamente por el Lancia Beta en 1975, se retoman para este prototipo, si bien su significado cambia del original High Performance Estate por High Performance Electric.
Y es que la electrificación será una de las claves en el renacimiento de Lancia, ya que el Nuevo Ypsilon, que será el primer nuevo Lancia en llegar, se lanzará en 2024 en versiones híbridas y eléctricas, mientras que a partir de 2026 sólo se lanzarán coches 100 % eléctricos. Finalmente, desde 2028, coincidiendo con el debut del nuevo Lancia Delta, la marca italiana venderá únicamente modelos eléctricos.
Así es el Lancia Pu+Ra HPE por dentro
Además de recuperar la denominación HPE, en Lancia han estrenado un importante glosario de términos que nos sirven para explicar algunas de las líneas maestras de sus futuros automóviles. Así, la interfaz S.A.L.A. (Sound Air Light Augmentation) permitirá a los ocupantes comunicarse con el vehículo y disfrutar, por ejemplo, del programa Chameleon, que adapta “el sonido, el aire y la luz” del habitáculo “en función del entorno exterior”.
Todo ello lo gestiona la inteligencia artificial TAPE (acrónimo de Tailored Predictive Experience o Experiencia Predictiva Adaptada), la cual centraliza las funciones de audio, climatización e iluminación para ajustar el ambiente en el interior del coche mediante un botón o una orden oral.
Finalmente, el objetivo es hacer que el conductor y sus eventuales acompañantes se encuentren como en casa cuando estén a bordo del Pu+Ra HPE. Y para lograr esa sensación de “hogar”, no solamente se ha recurrido a una amplia superficie acristalada y materiales cálidos pero sostenibles, sino que Lancia se ha asociado con el fabricante de muebles de diseño Cassina.
Así, aparte de los llamativos asientos, en el interior encontramos una alfombra redonda, mesitas delante y detrás o una consola central que se asemeja a una lujosa encimera de cristal. Lancia asegura, además, que el 70 % de los materiales del interior que se pueden tocar son “ecosostenibles”.
Asimismo, la tapicería de los asientos, que emula la tradicional gamuza de las tapicerías de los Lancia de los años 70, está fabricada en un “terciopelo de color ocre con certificación GreenGuard de baja emisión química e impacto medioambiental GWP”.
Por su parte, los paneles de las puertas están revestidos de MARM \ MORE, un material compuesto hasta en un 50 % de polvo de mármol de desecho, mientras que la mesa de centro se fabrica con acetato de celulosa, un material habitual en las montura de gafas.
En cuanto a la parte técnica, no hay mucha información. Sí sabemos que el Pu+Ra HPE es 100 % eléctrico y que responde a un “manifiesto” de Lancia según el cual en los próximos 10 años la autonomía superará los 700 kilómetros. De hecho, esos 10 años son el periodo en el que las propuestas de este Lancia Pu+Ra deberán traducirse en los modelos de producción de una marca a la que todos los aficionados al mundo del automóvil estamos deseando ver recuperar su esplendor.
