A falta de medio año para su lanzamiento, ya conocemos con detalle el exterior de la nueva generación del Mini Cooper eléctrico. La filtración de unas fotos tomadas durante una grabación obligó a la marca de origen inglés a publicar unas imágenes propias del exterior del coche. Por lo visto, el coche no lucía como debiera en los ‘robados’ y, una vez desvelado el secreto, prefirieron que se viese un poco más favorecido. Con anterioridad la marca había mostrado fotos oficiales aún con el coche camuflado, algo muy habitual en su matriz BMW.
Ahora, los intrépidos fotógrafos nos han desvelado la parte que aún no había salido a la luz: el salpicadero. El Mini Cooper eléctrico estará disponible con dos versiones, en lugar de una como sucede en la actual generación. En concreto, habrá una versión de acceso al Mini Cooper eléctrico denominada Cooper E, que conservará el motor de 184 CV, y el Cooper SE pasará a tener 218 CV y una batería de 54,2 kWh que le permitirá alcanzar los 400 kilómetros de autonomía. En el caso de la versión pequeña, el acumulador de energía permite almacenar 40,7 kWh, que darán para recorrer 305 km, mucho más que en el actual Cooper SE de idéntica potencia.
En este sentido, se rumorea con que en un futuro no muy lejano también veremos llegar una versión John Cooper Works totalmente eléctrica, aunque Mini no se ha pronunciado al respecto por el momento. Cabe recordar que, según la información oficial, la quinta generación del Mini Hatchback únicamente se ofrecerá con versiones eléctricas. En el caso de próximo Countryman, sí habrá motores térmicos.
Mini Cooper eléctrico, así es por dentro
Las fotografías muestran con bastante claridad un salpicadero totalmente renovado, aunque muchas partes aún están tapadas con tela. La gran revelación es que toda la información estará concentrada en la pantalla central redonda, que presenta un tamaño considerable.
En la parte superior de esta se aprecia el velocímetro, el indicador de marcha engranada y lo que parece ser un cuentakilómetros, lo que da a entender que la habitual instrumentación situada enfrente del conductor desaparece por completo. No obstante, en las imágenes también se aprecia una lámina que con toda seguridad corresponde al sistema de proyección de información Head-up Display, que permite consultar la información básica sin apartar la vista de la carretera.
No menos reveladora ha sido la parte inferior del salpicadero, donde hay una serie de mandos físicos. Alguno de ellos ya los conocíamos, como el selector de modos de conducción o el de puesta en marcha del motor. A ellos se suma un pequeño selector para el cambio, que reemplaza al anterior de tipo convencional y, de esta forma, se libera mucho espacio en la zona central. Por desgracia esa zona no estaba al alcance del objetivo del fotógrafo, por lo que no podemos saber cómo se ha aprovechado.
Fotos: CarPix