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El futuro de los coches no es la electricidad: es el amoníaco

Incierto, alternativo, diverso, son adjetivos propios de la definición de futuro, y hoy mas que nunca, en materia de motores para coches y vehículos de pasajeros, resulta muy adecuado usarlos.

Entre las distintas alternativas para motorizar los vehículos del presente y el futuro, la electricidad esta siendo la mas desarrollada, y con la vista puesta en 2050, el margen de maniobra para no abandonar la combustión como eje principal en la movilidad, aparecen los combustibles sintéticos, las pilas de hidrogeno y ahora también, el amoniaco.

Desde China, mas que muy interesada en encontrar una solución, por sus niveles de contaminación, y las exigencias que de organismos medioambientales internacionales reciben, llega el motor que funciona consumiendo amoniaco.

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Un escenario complejo lleno de pruebas y ensayos

Hidrogeno en el amoniaco

Es innegable que la lucha contra el cambio climático desarrollada desde las políticas ecológicas, y centrada en la transición del modelo energético, esta propiciando que la movilidad sufra las transformaciones necesarias en esa linea de sostenibilidad.

De ahí que los motores de combustión estén sufriendo el ataque, quizás, mas duro de toda su historia, y conforme se ven implantando avances tecnológicos, las alternativas para ellos sean vectores de incertidumbre, pruebas y ensayos, hasta conseguir definir correctamente uno o varios modelos a seguir.

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