El nuevo BMW Serie 5, incluido el nuevo BMW i5 totalmente eléctrico, ha iniciado su producción en la planta del Grupo BMW en Dingolfing, Baviera. La presencia del Ministro-Presidente de Baviera, Markus Söder, ha destacado la importancia de este hito para la región.
Una planta ejemplar
La planta de Dingolfing es una instalación de larga tradición en la producción de vehículos de la marca alemana y está celebrando este año su 50 aniversario en la fabricación de automóviles. En los últimos dos años, ha lanzado tres modelos totalmente eléctricos, incluidos el BMW iX y el BMW i7, además del nuevo BMW i5.
El aumento en la producción de vehículos eléctricos es una parte importante de la estrategia de electrificación del Grupo BMW. Con la incorporación del nuevo BMW i5, se espera que la cuota de vehículos eléctricos de batería pura en la producción total de la planta de Dingolfing aumente en más del 40% el próximo año.
Este enfoque hacia la movilidad eléctrica muestra el compromiso del Grupo BMW con la sostenibilidad y la reducción de las emisiones de carbono. La producción de vehículos eléctricos en una de las plantas más grandes de fabricación de BMW en Europa es un paso significativo hacia un futuro más limpio y sostenible en la industria automotriz.
Con la expansión de su línea de vehículos eléctricos, el Grupo BMW se está posicionando como un líder en la adopción de tecnología de vehículos eléctricos en el mercado automotriz, ofreciendo a los clientes una amplia gama de opciones de movilidad sostenible.
Un total de 15 BMW eléctricos entre 2021 y 2024
Milan Nedeljković, miembro del Consejo de Administración de BMW AG responsable de Producción, ha explicado en Dingolfing que “el BMW i5 y nuestra planta de Dingolfing son ejemplos perfectos de cómo el Grupo BMW se está transformando para la e-movilidad y desarrollando nuestras plantas en el camino hacia la BMW iFACTORY. La e-movilidad es la nueva normalidad en nuestras plantas de todo el mundo. Entre 2021 y 2024, habremos integrado un total de 15 vehículos totalmente eléctricos en nuestra red de producción”.
Para lograrlo, el Grupo BMW apuesta por arquitecturas flexibles y ofrece a sus clientes de todo el mundo la mayoría de sus modelos con diferentes variantes de propulsión. El BMW Serie 5, al igual que el BMW Serie 7 y el BMW X1, estará disponible con propulsión totalmente eléctrica, con motor de combustión interna o como híbrido enchufable.
Esto requiere un alto grado de flexibilidad, pero permite a la empresa utilizar eficientemente la capacidad de sus plantas y ajustar su oferta a la demanda de los clientes. Esto ha sido posible gracias a amplias inversiones en la red de producción. El Grupo BMW ha invertido más de mil millones de euros en la integración del BMW iX, el BMW Serie 7 y el BMW Serie 5 en la planta de vehículos de Dingolfing.
En los próximos años, el director de la planta, Christoph Schröder, espera que el lanzamiento del nuevo BMW Serie 5 impulse las cifras de producción de la planta: “El BMW Serie 5 ha sido tradicionalmente el modelo central de Dingolfing y esta vez volverá a dar un valioso impulso a los volúmenes”.
En 2022, más de 280.000 vehículos salieron de la cadena de montaje de la planta de Dingolfing. Durante el próximo año, con el inicio de la producción de los modelos BMW Serie 5 Touring y BMW M5 de octava generación, Schröder espera que esa cifra aumente a más de 300.000 vehículos.
Stefan Danner, Vicepresidente del Comité de Empresa de Dingolfing, añade que “junto con la exitosa transición a la e-movilidad, el BMW Serie 5 es fundamental para la utilización de la capacidad a largo plazo en nuestra planta, así como para asegurar los puestos de trabajo”.
Planta de Dingolfing: dos tercios son BMW Serie 5
De los aproximadamente 12 millones de vehículos BMW fabricados en esta planta hasta la fecha, ocho millones, es decir, dos tercios, son BMW Serie 5. Esto está estrechamente ligado a la historia de la planta de Dingolfing. Hace exactamente 50 años, en septiembre de 1973, el primer coche BMW salió de la línea de producción de la nueva planta de vehículos: un BMW 520i de color mandarina de la primera generación.
Desde entonces, la planta de la Baja Baviera se ha convertido en uno de los emplazamientos más destacados de la industria automovilística y en un motor para el desarrollo económico de la región. La masa salarial anual de los más de 18.000 empleados de BMW en Dingolfing supera los 1.000 millones de euros, y la planta contrata a unos 1.000 proveedores de la Baja Baviera.
Además de invertir en la planta de vehículos de Dingolfing, el Grupo BMW también ha canalizado más de mil millones de euros en la producción de componentes del tren motriz eléctrico en la ubicación desde 2015.
