Aunque los neumáticos de invierno y cuatro estaciones van ganando peso en nuestro mercado, las cadenas de nieve siguen siendo la alternativa más empleada en los mercados en los que el clima invernal requiere el uso de estos dispositivos de manera muy ocasional.
Conscientes de esta realidad, de lo complicado que puede ser montarlas para quien no esté habituado a hacerlo y de lo engorroso (e incluso peligroso) que es hacerlo, Hyundai y Kia han presentado un prototipo de rueda que integra cadenas de nieve retráctiles.
Así funcionan las ruedas con cadenas de nieve retráctiles de Hyundai
La tecnología de ruedas con cadenas de nieve integradas consta de llantas y neumáticos con un diseño específico en el que se integran unos módulos retráctiles. Habitualmente, estos módulos permanecen abatidos, mientras que, al toque de un botón, se despliegan para sobresalir de la banda de rodadura y actuar de forma parecida a las “palas” de una noria.
A diferencia de las cadenas de nieve tradicionales, que requieren detenerse, bajarse del vehículo y dedicar un rato a su colocación (normalmente en condiciones climáticas poco favorables, y eso suponiendo que las llevemos en el maletero), esta tecnología desplegará automáticamente “cadenas” para la nieve (fabricadas en aleación “con memoria de forma”) con solo presionar un botón.
“Esta innovación, que esperamos que algún día se introduzca en los vehículos Hyundai y Kia, refleja nuestro compromiso de convertir tecnologías avanzadas en soluciones del mundo real que beneficien a los clientes”, manifestó Joon Mo Park, jefe del equipo de desarrollo avanzado de chasis, quien añadió que “seguiremos desarrollando tecnologías que mejoren la seguridad y la comodidad de nuestros vehículos y aporten valor a nuestros clientes”.
Como puedes comprobar en el vídeo que hemos insertado sobre estas líneas, la tecnología de ruedas con cadena para la nieve integrada se basa en un conjunto específico de llanta y neumático que presenta ranuras radiales a intervalos regulares, como una pizza, con módulos metálicos insertados en estos canales.
Estos módulos pueden deformarse temporalmente mediante un actuador, que hace que sobresalgan de la banda de rodadura, mientras que cuando el actuador deja de trabajar, los módulos vuelven a su forma original.
Así, durante la conducción en condiciones normales, las piezas de aleación con memoria se comprimen en forma de letra ‘L’ y no entran en contacto con la superficie de la carretera, mientras que para conducir sobre nieve basta con pulsar un botón que permite a los módulos recuperar su forma original (con un perfil similar a una ‘J’), lo que hace que sobresalgan de la banda de rodadura y entren en contacto con la superficie, mejorando el agarre, la estabilidad y la seguridad en carreteras nevadas.
Otras ventajas de las ruedas con cadenas de nieve retráctiles de Hyundai
Además de servir para proporcionar motricidad extra sobre la nieve, los módulos metálicos pueden reemplazar los habituales testigos de desgaste del neumático, ya que en su posición “asfáltica” servirían para advertir al conductor del momento en el que la banda de rodadura se encuentra demasiado desgastada, entrando en contacto con el firme y generando un ruido que funcionaría como alerta.
Además, al tratarse de un sistema controlado electrónicamente, su conexión sería compatible con otros sistemas, como un programa específico del control de tracción y estabilidad e, incluso, un limitador de velocidad automático.
En cualquier caso, esta tecnología de cadenas de nieve retráctiles está pendiente de patente tanto en Corea del Sur como en Estados Unidos, y aún queda desarrollar su aplicación real y su industrialización para hacerla viable, ya que, como hemos visto, el sistema requiere llantas y neumáticos específicos, así como una conexión eléctrica en la propia llanta, que al ser un elemento en constante movimiento plantea también sus retos tecnológicos, por no hablar de la necesaria estanqueidad entre los segmentos metálicos y el neumático…
Dicho esto, Hyundai Motor ha manifestado que tanto los vehículos de la marca Hyundai como los de Kia planean considerar la producción en masa de este dispositivo una vez que se haya logrado el adecuado desarrollo tecnológico, se hayan validado las posteriores pruebas de fiabilidad y rendimiento y, lo más complicado, una vez que las legislaciones de los mercados en los que se comercializarían amparen su uso.
Más allá de la viabilidad del invento, cuyo principal inconveniente será la incompatibilidad de los vehículos que lo monten con las llantas y neumáticos convencionales, resulta interesante que Hyundai haya hecho pública su intención de lanzar al mercado esta propuesta, cuando lo habitual es que los fabricantes desarrollen cientos de patentes innovadoras de las que no informan al público y que en la mayoría de los casos no llegan a materializarse en innovaciones tecnológicas de producción en serie.
