La evolución tecnológica nunca deja de sorprender, y en el ámbito de la seguridad vial, no es diferente. La inteligencia artificial (IA) ha irrumpido en nuestras carreteras, transformando por completo la manera en que se supervisan y mantienen. La visión de un futuro con vehículos autónomos ya no parece tan distante, pero lo que es aún más impresionante es cómo esta tecnología está redefiniendo la inspección y conservación de nuestras vías públicas.
Desde la aparición de los primeros prototipos hasta su implementación en instituciones públicas y privadas, el camino recorrido por empresas como ASIMOB ha sido un viaje de innovación y colaboración. Inspirados por la visión de un futuro donde la tecnología no solo mejore nuestras vidas, sino que también promueva la seguridad y la eficiencia, un grupo de ingenieros decididos se unió para explorar el potencial de la inteligencia artificial en el ámbito de la seguridad vial.
Un avanzado inspector autónomo basado en la Inteligencia Artificial
El concepto de un ‘inspector autónomo de carreteras’ puede parecer sacado de una novela de ciencia ficción, pero hoy en día, es una realidad tangible. Gracias a la visión y el esfuerzo de empresas como ASIMOB, la supervisión de carreteras ya no depende exclusivamente del ojo humano.
Dispositivos equipados con IA y conectividad IoT recorren nuestras vías, detectando cualquier cambio o deterioro con una precisión sin precedentes y a un costo significativamente reducido. Este sistema es capaz de inspeccionar en marcha el estado de las señales de tráfico, detecta y evalúa el estado del firme, examina las condiciones de las barreras de protección, controla la señalización vertical y horizontal en zonas de obras, examina todo tipo de marcas viales y la adherencia de las carreteras…
Pero, ¿qué hace que este sistema sea tan revolucionario? La respuesta radica en su capacidad para superar las limitaciones de los métodos de inspección tradicionales. Mientras que los inspectores dependen de la vista y la memoria, así como de la exposición al peligro al circular por las carreteras, los vehículos equipados con tecnología de IA pueden detectar y registrar defectos mientras circulan a velocidad normal. Esta capacidad no solo aumenta la seguridad de los inspectores, sino que también garantiza una supervisión continua y exhaustiva de nuestras vías públicas.
Detecta el estado del firme, la señalización…
Además, la implementación de esta tecnología no se limita a un solo país o tipo de vía. Desde autopistas hasta calles urbanas, los beneficios son evidentes. En las autopistas, donde la velocidad y la calidad son imperativas, la capacidad de detectar y abordar rápidamente los defectos es crucial para garantizar la seguridad de los conductores.
En entornos urbanos, donde la densidad de tráfico y la diversidad de señalización presentan desafíos únicos, la tecnología de IA proporciona una solución eficaz y eficiente para mantener las calles seguras y en buen estado.
Ya hay organismos oficiales que apuestan por este tipo de inteligencia artificial
La colaboración entre empresas tecnológicas como ASIMOB y organismos gubernamentales y privados es fundamental para el éxito y la expansión de esta tecnología. A través de asociaciones estratégicas, se pueden adaptar soluciones a las necesidades específicas de cada región y tipo de vía, garantizando así un enfoque personalizado y efectivo para la supervisión de carreteras. Instituciones como el Ayuntamiento de Madrid, la Diputación Foral de Guipúzcoa o la Junta de Extremadura, entre otros, ya utilizan esta tecnología.
Pero la revolución no se detiene aquí. Con el continuo avance de la IA y la tecnología de visión artificial, las posibilidades son infinitas. Desde la detección de condiciones climáticas adversas hasta la optimización del mantenimiento preventivo, el potencial de esta tecnología para mejorar la seguridad vial solo está comenzando a ser explorado.
En definitiva, la inteligencia artificial ha llegado para transformar la forma en que supervisamos y mantenemos nuestras carreteras. Con una precisión sin precedentes y una eficiencia incomparable, esta tecnología está allanando el camino hacia un futuro más seguro y sostenible para todos los usuarios de la vía pública. La IA también se emplea en otros campos, como en los semáforos, radares…
