La Guardia Civil de Tráfico en España efectúa controles rutinarios con el objetivo de garantizar la seguridad vial en nuestras carreteras. Cualquier conductor puede ser requerido para un control donde diversos documentos serán solicitados para verificar la legalidad y la normativa vigente.
En estos casos, es de suma importancia conocer cuáles son los papeles que los agentes podrán requerirnos para evitar multas o complicaciones. A continuación, desgranaremos qué documentación debemos llevar al día y a mano para atender a estos requerimientos.
DOCUMENTOS DEL CONDUCTOR: PERSONALES E INDISPENSABLES
El primer grupo de documentos requeridos son de carácter personal y están ligados directamente con la identificación del conductor y su capacidad para conducir. En primer lugar, el permiso de conducción en vigor es fundamental, pues acredita que el individuo está cualificado para manejar el vehículo. Además, la tarjeta de identificación o pasaporte, sirve de prueba de identidad. Cabe mencionar que en caso de no presentar el permiso de conducción, aunque se esté en posesión de él, se podría incurrir en una sanción económica.
Asimismo, es importante llevar siempre la documentación sobre el seguro del vehículo, específicamente el recibo del pago y la póliza, que prueban que el coche está asegurado y, por lo tanto, apto para circular. Un dato no menos relevante es que desde la introducción de la Dirección Electrónica Vial y el sistema de puntos, es imprescindible tener asociada una dirección de correo electrónico o teléfono móvil al permiso, para poder recibir las notificaciones de tráfico pertinentes.
PASE A BORDO: DOCUMENTACIÓN DEL VEHÍCULO SEGÚN GUARDIA CIVIL
El siguiente conjunto se enfoca en la propia documentación del vehículo. Los agentes de la Guardia Civil de Tráfico suelen solicitar el Permiso de Circulación, donde figuran los datos del automóvil y la titularidad del mismo. Asimismo, la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) es vital, debiendo presentar la tarjeta ITV con el correspondiente sello de que la inspección está superada y la pegatina visible en el lugar reglamentario del parabrisas que indique que está al día.
Un documento más reciente, pero igualmente relevante, es el certificado de emisiones, que muestra el nivel de emisiones contaminantes del coche, algo cada vez más supervisado por las autoridades debido a la concienciación ambiental y los esfuerzos por reducir la huella de carbono. Por último, es preciso mencionar que llevar el recibo del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica actualizado es un requerimiento legal que, de no cumplirse, puede derivar en sanciones.
CUANDO LA EXCEPCIÓN SE CONVIERTE EN REGLA: CASOS PARTICULARES
En determinadas circunstancias, pueden ser solicitados otros documentos que, aunque no son la norma general, pueden ser igualmente obligatorios. Por ejemplo, si se conduce un vehículo de empresa, será necesario disponer de una autorización para poder conducirlo. Asimismo, si el vehículo lleva un remolque de gran tonelaje, se debe portar la documentación específica que acredite su legalidad y segura circulación.
Un aspecto moderno y cada vez más presente es la documentación digital. Muchos conductores optan por almacenar sus documentos en aplicaciones móviles oficialmente reconocidas, que facilitan la presentación de los mismos de forma electrónica. Sin embargo, se recomienda asegurarse de que la batería del dispositivo móvil esté cargada y el dispositivo operativo para mostrar los documentos sin inconvenientes.
Querido lector, siguiendo estas indicaciones y manteniendo la documentación en orden, estarás preparado para satisfacer las demandas de los agentes de la Guardia Civil de Tráfico y contribuir a la seguridad y al buen funcionamiento de nuestras carreteras. Recuerda, ir al día con los papeles es parte de nuestra responsabilidad como conductores conscientes y respetuosos de las normas de convivencia vial.
NUEVAS TECNOLOGÍAS EN LA GESTIÓN DE DOCUMENTOS
El avance de la tecnología también ha alcanzado el ámbito de la documentación vehicular y personal necesaria para la circulación. La DGT, el organismo gubernamental encargado de la regulación del tráfico, ha implementado sistemas digitales que permiten llevar a cabo muchas gestiones sin necesidad de papel. Un ejemplo notorio de esta modernización es la posibilidad de presentar la documentación del vehículo a través del sistema electrónico de la DGT, conocido como «miDGT», donde se pueden consultar y acreditar permisos y datos del coche sin necesidad de llevar los documentos en formato físico.
Además, existen aplicaciones certificadas que permiten al conductor almacenar su documentación personal y presentarla a los agentes de forma electrónica. Estas tecnologías no son solo un alivio para los conductores que ahora pueden llevar encima toda su documentación con un par de clics, sino que también facilitan la labor de los agentes de la Guardia Civil al agilizar los controles y poder focalizar más en aspectos esenciales de la seguridad vial.
CONSEJOS PARA UN CONTROL SIN PERCANCES
Resulta tan importante conocer los documentos necesarios como la actitud y proceder durante un control de tráfico. Al ser detenidos por los agentes, se debe permanecer en el vehículo a no ser que se indique lo contrario, y poner las manos sobre el volante para garantizar una visibilidad clara de nuestras acciones. Es recomendable evitar movimientos bruscos o gestos que puedan interpretarse como una señal de alerta para los agentes.
Cuando se nos solicite la documentación, se debe proveer calma y cortésmente. Si alguna vez falta alguno de los documentos requeridos, es mejor informarlo de forma abierta y solicitar la posibilidad de presentarlo posteriormente; muchas veces se ofrece la opción de acreditarlo en un plazo determinado ante las autoridades correspondientes. Por supuesto, mantener al día los documentos y la ITV es crucial para evitar sanciones y demoras innecesarias.
CUANDO LA RUTINA SE ENCUENTRA CON LO EXTRAORDINARIO
No debemos olvidar los escenarios menos comunes pero posibles. Si estamos al volante de un vehículo especial, como una moto o scooter adaptados, un vehículo histórico o un coche con características técnicas diferentes, es probable que se requieran documentos adicionales que acrediten la adaptación o las características especiales del mismo.
Las condiciones del vehículo, como los neumáticos y las ruedas, no son un documento per se, pero su buen estado es susceptible de revisión durante un control. Por último, aunque menos frecuente, los agentes pueden interesarse por permisos específicos de circulación relacionados con la carga o el uso profesional del vehículo, una situación a tener en cuenta por aquellos que manejan bajo estas condicionantes profesionalmente.
