La seguridad vial sigue siendo una preocupación importante en toda Europa, especialmente con el aumento de los accidentes de tráfico en los últimos años. A pesar de los esfuerzos y las promesas de reducir las muertes en carretera, la realidad muestra un panorama desafiante y lleno de incertidumbre sobre cómo abordar este problema.
1Los retos de las ayudas a la conducción
Las ayudas a la conducción ADAS, que se esperaba que revolucionaran la seguridad en las carreteras, han resultado ser menos efectivas de lo esperado. Aunque concebidas para mejorar la seguridad, muchos conductores las perciben como intrusivas e incómodas, generando distracciones y malestar al volante. Además, el coste adicional que representan para los nuevos vehículos no ha sido bien recibido por los consumidores.