La OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) acaba de lanzar un aviso a los propietarios de coches de los modelos Citroën C3 o DS3 fabricados entre 2009 y 2017.
Esta entidad ha alertado de un fallo en los airbags de estos vehículos, del que ya han informado los propios fabricantes a través del sistema europeo de alertas rápidas entre los Estados Miembros y la Comisión Europea, RAPEX.
Los airbags defectuosos que equipan estos coches son de la marca Takata y Citroën y DS no son los únicos fabricantes afectados. El problema ya se detectó hace varios años y ha salpicado a marcas como Seat y también a otras como Audi, BMW o Skoda. En el caso de estas últimas se vieron perjudicados un gran número de modelos.
Por lo que respecta a Citroën y DS, ambas marcas del Grupo Stellantis, la OCU calcula que el fallo puede afectar a unos 125.000 vehículos en España, si todos los coches vendidos tuvieran estos airbags.
Los airbags de Takata se deterioran con el paso del tiempo y, al desplegarse durante un choque, se desprenden fragmentos que reducen su eficacia de protección y que podrían causar daños a los ocupantes.
¿Qué hacer para saber si el coche está afectado?, según la OCU
Tanto Citroën como DS disponen ya de una página web (enlace a la web de Citroën y enlace a la web de DS) en la que los conductores pueden comprobar si su vehículo está afectado por esta campaña de reparación, que es gratuita. Para saberlo, solo hay que introducir el número de bastidor en el buscador y la marca informará si este puede acudir con el coche a un taller concertado para que sustituyan el airbag sin cargo.
Otra de las posibilidades que apunta la OCU es ponerse directamente en contacto con el servicio postventa de la marca, donde el usuario será informado de los pasos que tiene que dar para averiguar si su coche está afectado por el airbag defectuoso.
Desde la OCU explican que consideran «positivo» que los fabricantes alerten de los fallos en sus productos y se ofrezcan a repararlos de forma gratuita, aunque subrayan que lo ideal sería «que sus controles de calidad detectaran este tipo de problemas antes de ponerlos en el mercado».
El problema con los airbags de Tataka no es algo nuevo. Desde hace más de una década, los defectos detectados en los equipamientos de este fabricante ya han provocado la sustitución de más de 67 millones de airbags de modelos de más de una veintena de marcas de automóviles en todo el mundo. Además, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) estadounidense ha relacionado las bolsas defectuosas con varios fallecimientos.
