Hacer flotas corporativas más ecológicas. Ese es el objetivo que la Federación Europea de Transporte y Medioambiente (T&E) se ha fijado al solicitar a la Comisión Europea que surja tras las próximas elecciones al Parlamento Europeo que apruebe un nuevo Reglamento sobre Flotas Corporativas dentro de los primeros 100 días de su nuevo mandato.
Según T&E, el nuevo reglamento debería de sustituir a la actual Directiva Europea de Vehículos Limpios (CVD, según sus siglas en ingles) y contribuir a “hacer flotas corporativas más ecológicas”. Además, este nuevo reglamento serviría, según la citada Federación, para facilitar la creación de una fuerte demanda en las flotas de empresa de nuevos vehículos durante los próximos años en toda la Unión Europea, factor que será clave para que la transición ecológica sea exitosa”.
Consulta pública para la ecologización de las flotas
El pasado mes de febrero, la Comisión Europa abrió una consulta pública respecto de la ecologización de las flotas corporativas con objeto de averiguar si la Unión Europea debería establecer nuevos objetivos vinculantes en materia de vehículos cero emisiones (ZEV) de manera obligatoria para este segmento del mercado.
En opinión de T&E, las grandes flotas corporativas presentan una gran oportunidad para impulsar la demanda de vehículos cero emisiones fabricados en la UE, así como generan grandes inversiones en la cadena de suministro de baterías y permiten acelerar los “muy necesarios” recortes de emisiones en el sector del transporte, “de una manera socialmente justa” .
Según los datos que proporciona el mercado europeo, actualmente el 60 % de los turismos y todoterrenos nuevos de la Unión Europea están matriculados a nombre de empresas, la mayoría de los cuales son propiedad directa de grandes compañías para integrarlos en sus flotas corporativas. Y otro tanto sucede igualmente con la mayoría de las furgonetas y camiones nuevos.
Flotas, mayor y mejor acceso a financiación
Desde T&E se destaca precisamente que el hecho de que estas matriculaciones se efectúen a nombres de empresas, que tienen un mejor acceso al capital y que además se benefician de unas mayores exenciones fiscales de tipo corporativo, permitiría que fueran ellas las que deberían liderar de manera significativa la transición europea hacia un transporte sin emisiones.
Desde la citada organización, se explica que es posible establecer nuevos objetivos vinculantes para las flotas en la UE de forma “sencilla y directa”, lo que además permitiría centrarse en los actores de la movilidad más importantes, pues, por poner un ejemplo, las empresas con flotas de 100 o más vehículos representan ya de por sí el 34% de todas las nuevas matriculaciones que se producen anualmente”.
Según los datos proporcionados por T&E, en el caso de las furgonetas, las grandes flotas corporativas si bien representan únicamente al 5% del total de las empresas de la UE, son las responsables del 40% de todas las nuevas ventas que de este tipo de vehículos se producen anualmente. Y si nos centramos en los camiones, las flotas de gran tamaño, que representan el 21% de las empresas, disponen del 74% de los nuevos vehículos de este tipo matriculados en el parque.
Objetivos vinculantes compra de vehículos 0 emisiones
Para la Federación Europea de Transporte y Medioambiente, el nuevo reglamento a aprobar debería establecer, de manera “sencilla y eficaz” objetivos vinculantes de compra de unidades “100 por cien cero emisiones” de aquí hasta el año 2030 para las grandes flotas de más de 100 unidades compuestas por vehículos de turismo y todoterreno, incluidas las pertenecientes a las operadoras de renting y leasing, y de igual manera, hacerlo con las flotas de furgonetas.
Igualmente, se pide que este objetivo se combine con otro superior, también vinculante, que fuerce a las flotas convertir todo su stock de unidades a vehículos cero emisiones con fecha límite para el año 2035. De igual modo, las flotas de gran tamaño de camiones, autobuses y autocares deberían también de manera progresiva aunque obligada transformar su configuración a vehículos cero emisiones para el año 2040, con objetivos parciales en cuanto al stock de ZEV, cifrados, por ejemplo, en el 90% de la flota, aunque con cierta flexibilidad para facilitar a aquellas que estén interesadas la posibilidad de elegir sus propios ritmos de aumento en la velocidad de su transformación y poder completar la misma para el 2035.
Igualmente, estos objetivos parciales deberían introducir ciertos elementos de flexibilidad para que las flotas pudieran optar por sus propios ritmos de aumento en sus compras o que estos pudieran aplicarse igualmente en aquellas empresas que operan con vehículo en renting o contratados bajo cualquier otra modalidad, siempre que su facturación supere los 50 millones de euros.
T&E pide normativa vinculante para empresas sin flota
Desde T&E también se alude a la necesidad de que estos grandes actores que operan mediante empresas intermedias o subcontratistas que les transportan sus mercancías ayuden y apoyen a los transportistas a efectuar su transición a un modelo de movilidad cero emisiones.
La nueva normativa y regulación que desde T&E se solicita a la UE que regule en el nuevo período de sesiones que se abrirá tras las próximas elecciones europeas, incide igualmente en la necesidad de incluir una clausula en la misma referente al origen de los vehículos. Así, para apoyar a la industria europea, esta norma debería excluir a aquellos vehículos cero emisiones producidos fuera de Europa de cualquier tipo de exención fiscal corporativa o incentivo para vehículos corporativos cero emisiones, como ya se hace en otras regulaciones europeas como es el caso de la Ley de Industria Net-Zero de la UE.
La citada norma debería entrar en vigor de manera forzosa cuando haya países específicos no pertenecientes a la UE que representen un determinado porcentaje de las ventas en bloque realizadas y siempre que las diferencias en precio de los vehículos no superasen un determinado umbral en su cuantía.
Incentivaría las ventas de todo tipo de vehículos
Los cálculos realizados por T&E contemplan que, de aprobarse dicha regulación sobre los objetivos de transformación de las flotas en cuanto a incorporación de vehículos cero emisiones se refiere, la adopción de estos podría incrementarse en un 72% para el caso de las unidades de automóviles de turismo hasta 2030 y, en función del tamaño de la flota, la adopción de vehículos ZEV podría aumentar en hasta un 63% en el caso de las furgonetas en el mismo plazo de tiempo (hasta 2030) y hasta en un 74% en el de los camiones (hasta 2035).
Por otra parte, el establecimiento de estos nuevos objetivos permitiría a los fabricantes de turismos, furgonetas y camiones afianzar la seguridad de sus inversiones para aumentar su capacidad de producción y las cadenas de valor de las mismas facilitando la implementación de las mismas al tiempo que mejorando su capacidad de cumplir con los estándares comprometidos en cuanto a sus emisiones de CO2 se refiere.
Y, finalmente, otra ventaja adicional de la nueva regulación que solicita T&E sería la paulatina reducción que durante los próximos años se produciría en cuanto a emisiones por parte del transporte de carretera se refiere. De cumplir con sus objetivos de transformación, las grandes flotas contribuirían a incrementar en un 14% para el año 2030 y en un 24 % para el 2040 los ahorros adicionales necesarios para cumplir con los objetivos climáticos de la UE.
