En un esfuerzo continuo por mejorar la seguridad vial y reducir el número de accidentes mortales, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha introducido nuevas medidas que modifican la forma en que los radares detectan el exceso de velocidad en España. La antigua y conocida ‘regla del 5 y del 7’ ha sido reemplazada por una normativa más estricta y precisa. Este artículo detalla los cambios implementados, su impacto en la conducción diaria y las razones detrás de esta actualización.
1La nueva normativa de la DGT
La DGT, bajo la dirección de Pere Navarro, ha intensificado sus esfuerzos para controlar la velocidad en las carreteras españolas. Para ello, se han instalado numerosos dispositivos de vigilancia, incluidos 780 radares fijos, 545 radares móviles, 92 velocímetros de tramo, 12 helicópteros, 39 drones, 15 furgonetas camufladas y 232 cámaras de vigilancia.
El objetivo de estas medidas es claro: reducir el número de muertes y accidentes en las carreteras. Durante el verano, época en la que se incrementa notablemente el tráfico, estos dispositivos desempeñan un papel crucial en la monitorización y control de la velocidad, así como en la detección de conductas peligrosas al volante.