Conocido mundialmente por su impresionante obra arquitectónica, Norman Foster ha dejado una huella imborrable en el mundo del diseño con estructuras icónicas como el «Gherkin» de Londres y el Apple Park. Sin embargo, lo que muchos desconocen es su pasión por los coches, una pasión que se materializó a finales de los años 70 cuando encargó un vehículo único y futurista: el Aston Martin Bulldog.
Este coche, sorprendentemente similar al moderno Cybertruck, refleja la vanguardia y la visión futurista que caracterizan al arquitecto. Imagina un coche diseñado con la precisión y la estética de un avión de combate furtivo. Su carrocería afilada en forma de cuña y sus puertas de ala de gaviota evocan una sensación de velocidad y tecnología avanzada. Construido en 1979, fue concebido para romper la barrera de las 200 mph, con una velocidad máxima declarada de 240 mph. Aunque durante las pruebas no logró alcanzar esta cifra, sí consiguió una impresionante velocidad máxima de 192 mph, destacándose como una máquina asombrosa para su época.
¿Qué características tiene el Aston Martin Bulldog de Norman Foster?
El corazón del Bulldog es un motor V8 biturbo que genera 600 caballos de fuerza. Esta potencia, junto con su diseño aerodinámico, lo convertía en un serio aspirante a romper récords de velocidad. La combinación de ingeniería de alto rendimiento y diseño innovador hace del Bulldog un coche excepcional, capaz de capturar la imaginación de cualquier entusiasta de los automóviles.
El interior del coche tan particular de Norman Foster no decepciona. A pesar de su exterior futurista, el coche ofrece un sorprendente lujo. Equipado con asientos de cuero, aire acondicionado y una versión temprana de un tablero digital, este Aston Martin combina comodidad y tecnología de una manera que era revolucionaria para su tiempo. Este enfoque en la combinación de funcionalidad y estilo es algo que sin duda resonó con el propio arquitecto, conocido por su capacidad para fusionar forma y función en sus diseños.
¿Qué precio tiene el Aston Martin Bulldog de Norman Foster?
La exclusividad del Aston Martin Bulldog es incuestionable, tanto en términos de diseño como de precio. Este coche único ha alcanzado precios astronómicos en el mercado, con un valor estimado de 19,4 millones de dólares, convirtiéndolo en una verdadera joya para coleccionistas. Este precio refleja no solo la rareza del Bulldog, sino también su importancia como un símbolo de innovación y excelencia en la ingeniería automotriz.
Para Norman Foster, este modelo es más que un coche; es una extensión de su visión creativa y su pasión por la innovación. Su elección de este vehículo particular habla de su aprecio por el diseño futurista y el alto rendimiento, cualidades que también se reflejan en su trabajo arquitectónico. El Bulldog, con su diseño audaz y su impresionante rendimiento, es un testimonio de lo que se puede lograr cuando se combinan la pasión y la ingeniería de vanguardia.
