En estos últimos meses han corrido ríos de tinta sobre qué pasaría con el futuro del Porsche Cayenne, del que ya habíamos visto prototipos muy camuflados. Finalmente, ha sido la propia marca alemana la que ha confirmado el futuro del que es uno de los modelos más importantes (si no el que más) de su historia reciente.
La cuarta generación de este SUV de lujo verá la luz en 2026 y será 100 % eléctrica, basada en la plataforma PPE (Premium Platform Electric) que también se emplea en el Macan y los Audi Q6 e-tron y A6 e-tron. Ahora bien, Porsche ha indicado que este modelo convivirá hasta 2030 (y puede que más adelante) con el actual Cayenne con motores de gasolina y híbridos enchufables.
De este modo ha descartado de un plumazo todo tipo de rumores que surgieron a raíz de las primeras fotos espía, que incluso hubo quien pensó que se trataba de la materialización del proyecto K1, que nació como una especie de monovolumen de siete plazas y que, finalmente, se convertirá en un crossover de altas prestaciones que se situará por encima del Cayenne, como ya informamos a principios del pasado año.
El Cayenne eléctrico tendrá un estilo muy similar al Macan
En su comunicado oficial, Porsche ha desvelado unas fotos del Cayenne eléctrico camuflado, de una unidad prácticamente idéntica a la fotografiada por nuestros colegas de SH Proshots. Las imágenes dejan apreciar una carrocería aparentemente más larga que en el actual modelo, motivo que había llevado a diversas fuentes a pensar en que se trataba de una mula de pruebas del proyecto K1. Lo cierto es que el futuro Cayenne adoptará una silueta muy similar a la del Macan eléctrico, con la luneta trasera tendida, al estilo del actual Cayenne Coupé.
Tampoco debería de haber sorpresas en el habitáculo, que será prácticamente idéntico al del Macan, con un diseño muy limpio y tres pantallas a lo largo del salpicadero, incluida una de 10,9 pulgadas destinada de manera exclusiva al pasajero. Además, la destinada a la instrumentación, la de mayor tamaño con 12,6 pulgadas, estará ligeramente curvada. En cuanto a la central, de 10,9 pulgadas, estará enfocada al infoentretenimiento y tendrá un sistema operativo basado en Android Automotive (compatible con Android Auto y Apple CarPlay).
Gracias al empleo de una plataforma exclusiva para modelos 100 % eléctricos, el Cayenne eléctrico disfrutará de un gran aprovechamiento del espacio disponible, tanto en el espacio destinado a los pasajeros como para el equipaje. En este último sentido se espera una capacidad del maletero principal superior a 700 litros, a los que se sumaran en torno a otros 100 litros más bajo el capé delantero, un emplazamiento ideal para transportar los cables de carga.
En cuanto a la gama mecánica, en el caso del Cayenne eléctrico se procederá de igual manera que en el Macan, con un lanzamiento escalonado de las diferentes versiones. Si tomamos de referencia a este último, primer llegaron las versiones Macan 4 y Macan Turbo, con potencias máximas de 408 y 639 CV, respectivamente, a la que meses después de sumaron el Macan (el único con un solo motor) con 360 CV y el Macan 4S con 516 CV.
En el caso del Cayenne eléctrico se prescindirá de la opción menos potente y únicamente se ofrecerán versiones dual motor con tracción a las cuatro ruedas. No es descartable alguna versión más orientada a la conducción deportiva, con ajustes específicos de la suspensión y apellido GTS, tal y como sucede en el Cayenne de gasolina. También es muy probable la llegada de una versión de altas prestaciones, al estilo del turbo GT que se ofreció en el anterior Cayenne.