El Lamborghini Temerario es un modelo completamente nuevo que reemplaza al Huracán, comercializado durante los 10 últimos años. Al igual que su hermano mayor –el Lamborghini Revuelto–, cuenta con un sistema de propulsión V8 biturbo híbrido enchufable (PHEV), si bien la firma italiana prefiere hablar de High Performance Electrified Vehicle o Vehículo Electrificado de Altas Prestaciones (HPEV).
Presentado en el transcurso de la semana del motor de Monterrey (California, EE. UU.), el Lamborghini Temerario combina un motor V8 con tres motores eléctricos. Uno de estos motores se encuentra intercalado entre la unidad de combustión y el cambio –como viene siendo habitual en los PHEV longitudinales–, entregando el par al eje trasero, mientras que cada uno de los dos restantes se encarga de proporcionar par a una de las ruedas del tren delantero.
Más allá de este ambicioso pero no sorprendente planteamiento técnico, en Lamborghini han querido dar el do de pecho con su unidad de combustión, para el que han buscado ofrecer la máxima potencia específica (de ahí su sobrealimentación mediante dos turbocompresores) en combinación con “la respuesta propia de un motor atmosférico clásico de altas revoluciones”.
Así, el motor V8 cubica 4,0 litros y ofrece nada menos que 800 CV al diabólico rango de entre 9.000 y 9.750 r.p.m., con la línea roja en 10.000 r.p.m., un régimen de giro más propio de un motor atmosférico de competición que de una unidad de calle sobrealimentada. Su par máximo se sitúa en los 730 Nm, mientras que la potencia máxima combinada con lo que aporta la parte eléctrica es de 920 CV.
El Lamborghini Temerario promete una sinfonía acústica única
En Lamborghini están muy orgullosos de su nuevo sistema de propulsión, que ha requerido la adopción de numerosas soluciones técnicas provenientes de la competición, e insisten especialmente en el sonido logrado por la combinación de su cigüeñal plano y su capacidad de girar a elevadas revoluciones.
Rouven Mohr, CTO de Lamborghini, asegura que “con el V8 biturbo, la amplitud y la frecuencia del sonido aumentan a medida que sube el régimen del motor y, gracias al cigüeñal plano, unas sutiles vibraciones subrayan la potencia del propulsor en función del régimen del motor. Para los ocupantes, viajar en el Temerario supone una experiencia increíble para todos los sentidos. Los conductores se emocionarán con el potente sonido Lamborghini y lo sentirán en cada fibra de su cuerpo”.
Sólo de cara a lograr el sonido deseado, se han implementado diversas medidas técnicas que incluyen no sólo las habituales válvulas que guían los gases de escape a través de diferentes conductos o la ayuda de un sintetizador para modular artificialmente el sonido, sino incluso conexiones físicas entre las dos bancadas del V8 de cara a lograr la resonancia deseada. Incluso los paneles del habitáculo y diversos componentes han adaptado su diseño para trasladar con mayor intensidad determinadas frecuencias y transmitir un cierto rango de vibraciones generadas por la mecánica.
Huelga decir que habrá varios modos de conducción –Città, Strada, Sport y Corsa– y que cada uno contará con su propia firma acústica. En el modo Città (pensado para entornos urbanos), el motor eléctrico es el protagonista. El modo Strada (para carretera y autopista), ofrece un sonido “deportivo pero discreto”, mientras que si queremos que el Lamborghini Temerario despliegue todos sus recursos acústicos deberemos emplear los modos Sport y Corsa.
El Lamborghini Temerario es enchufable… pero poco
Una de las singularidades del Lamborghini Temerario es que se trata de un híbrido enchufable con una batería muy compacta, desarrollada para ofrecer la máxima densidad energética posible y embarcar el peso justo y necesario para proporcionar la energía eléctrica que permita ofrecer las prestaciones requeridas sin tener que acarrear ni un gramo más de lo necesario.
Así, la batería ofrece únicamente 3,8 kWh pero es capaz de alimentar los tres motores eléctricos del vehículo, que en el caso del tren delantero pueden proporcionar picos de 220 kW (299 CV) y 2.150 Nm, si bien de manera continuada el flujo de potencia del tren delantero se limita a 60 kW (82 CV); poco más de un 10 % de lo que ofrece el motor de gasolina.
Realmente, el principal logro del sistema es su capacidad de ofrecer tracción total, a la vez que aporta una “sobrealimentación” eléctrica efectiva de unos 120 CV y –aún más importante– “rellena” el lag habitual de los motores turbo, todo ello con un sobrepeso mínimo para este Lamborghini Temerario, construido a partir de un vanguardista bastidor de aluminio.
Marginalmente, también se consigue un gol de cara a maquillar los consumos y las emisiones oficiales. Éstas se reducen hasta en un 50 % en comparación con el Lamborghini Huracán, a la vez que el vehículo pasa a calificarse como un modelo “verde” en muchos mercados. De hecho, con la actual legislación, en España le corresponde la etiqueta Eco de la DGT por su condición de híbrido, si bien no puede obtener la etiqueta Cero Emisiones dada su escasa (y aún no declarada) autonomía eléctrica.
Ahora bien, eso no quita para que el Lamborghini Temerario pueda enchufarse a la red para recargar su batería en media hora a un máximo de 7 kW, si bien en condiciones normales el vehículo se encargará de usar su motor eléctrico principal (movido por la frenada regenerativa o por el V8) para generar la electricidad necesaria de cara a tener la batería lo suficientemente cargada como para que podamos exprimir la máxima potencia cuando la necesitemos.
Las prestaciones del Lamborghini Temerario no son las de un modelo de acceso de gama
Con todo esto, el Lamborghini Temerario es un deportivo que, pese a no ser especialmente compacto, sí es relativamente ligero, con una longitud de 4,71 metros, una batalla de 2,66 metros y una masa en orden de marcha de 1.765 kilos. Esto le permite desarrollar una velocidad máxima de 343 km/h y una aceleración de 2,7 segundos en el paso de cero a 100 km/h.
Para lograr esta brillante cifra de aceleración, no basta con disponer de 920 CV. Evidentemente, la tracción total “a la carta” y el torrente inmediato de par motor liberado por los motores eléctricos son los principales responsables, aunque también ponen su granito de arena una nueva y compacta caja de cambios de doble embrague (situada tras el motor) y una refinada huella aerodinámica, proporcionada por una carrocería firmada por Mitja Borkert, director de diseño de Automobili Lamborghini.
A todo esto, no faltan llantas (de 20” delante y 21” detrás) en un menú de tres diseños y materiales (fundición de aluminio, aluminio forjado o carbono), aditamentos de fibra de carbono para la carrocería y el interior, un paquete ‘Alleggerita’ destinado a los clientes que quieran disfrutar su Lamborghini Temerario especialmente en circuito (aligera 25 kilos el peso total del vehículo e incrementa en un 67 % la carga aerodinámica), frenos de carbono (de serie) y Lamborghini Telemetry 2.0.
Lamborghini Telemetry 2.0 es una aplicación a bordo diseñada para sacar el máximo partido al Lamborghini Temerario en circuito. Muestra el recorrido y la información sobre los tiempos por vuelta y en cada sector directamente en el cuadro de instrumentos digital. Además, incluye más de 150 de los circuitos más importantes del mundo (con sus variantes) y aporta informaciones útiles como la presión de los neumáticos o dónde y cuándo interviene la electrónica.
Además, los usuarios pueden grabar vídeos de su experiencia utilizando las cámaras de a bordo con los datos de telemetría integrados; vídeos que se pueden ver directamente en la pantalla central o pueden compartirse a través de la aplicación Unica.
Y, por el momento, esto es todo. Aún no hay precios oficiales, pero lógicamente el precio base del Lamborghini Temerario será superior al del Huracán, cuya cifra base parte de unos 270.000 euros. Con toda la tecnología embarcada y su nivel de potencia, no sería extraño encontrar un precio de partida superior a los 400.000 euros, lo que todavía le dejaría lejos de lo que tendrás que pagar si quieres hacer con su hermano mayor, el Lamborghini Revuelto.