La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) es un proceso vital para garantizar la seguridad y el funcionamiento adecuado de los autobuses que circulan por las calles de Madrid. En un contexto donde el transporte público es el corazón de la movilidad urbana, los datos recientes proporcionados por el Archivo de Vehículos de la Comunidad de Madrid a la Asociación de Entidades para la Inspección Técnica de Vehículos (AEMA-ITV) revelan una realidad que merece ser destacada: el 82,2% de los autobuses de Madrid han superado favorablemente la ITV en el primer semestre del año. Esto implica que 4.843 de los 5.899 autobuses inspeccionados están en condiciones óptimas para seguir operando.
1Un transporte seguro y en condiciones para todos
Con casi 250 millones de pasajeros transportados por los autobuses de la Comunidad de Madrid en los primeros seis meses del año, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), queda clara la importancia de que estos vehículos cumplan con todas las normativas de seguridad y medioambientales. La ITV no es solo un requisito legal, sino una herramienta esencial para proteger la vida de los pasajeros y del resto de usuarios de las vías públicas. Jorge Soriano, presidente de AEMA-ITV, enfatiza que «la ITV es clave para garantizar que los autobuses cumplen con todos los requisitos para circular, lo que se traduce en una mayor seguridad en las vías públicas y en un menor impacto medioambiental».
Pero, ¿qué pasa con el 17,8% de los autobuses que no han superado la ITV? Estos vehículos, que representan casi 1 de cada 5 inspeccionados, han presentado defectos graves que impiden su circulación hasta que no sean subsanados. Las principales causas por las que estos autobuses no pasan la ITV son, en gran medida, problemas relacionados con las emisiones contaminantes, los frenos, el alumbrado, y otros aspectos críticos del vehículo.