Si hay alguien que ha desafiado las expectativas y roto los estereotipos en las últimas semanas, ese es Ilian Tobianah, más conocido como «Zeus» en las redes sociales y que a veces es confundido con un vagabundo. Con un estilo desaliñado y una apariencia que podría confundirse con la de un «mendigo chic», sus looks excéntricos y despojados han capturado la atención de muchos. Sin embargo, nada en su vida es lo que parece a simple vista.
Lejos de ser una persona sin recursos, él es, de hecho, un exitoso abogado especializado en el sector inmobiliario en París, uno de los mercados más lucrativos y competitivos del mundo. Su patrimonio neto, estimado en alrededor de 50 millones de dólares, es testimonio de su éxito en un sector donde solo los mejores sobreviven y prosperan. Este contraste entre su apariencia y su verdadera identidad financiera es lo que ha hecho que muchos lo sigan con asombro y curiosidad.
¿Cuáles son los coches que tiene este «vagabundo»?
La verdadera sorpresa viene cuando se le ve en su hábitat natural: al volante de vehículos de altísima gama. Desde un Lamborghini Aventador hasta un Bentley, e incluso el icónico coche de Batman, Tobianah demuestra que su estilo de vida es mucho más que una simple fachada. Entre sus joyas sobre ruedas también se encuentra un Delage D12, un superdeportivo híbrido de fabricación francesa que, por sí solo, ya cuesta millones. Para alguien que parece no encajar en el molde tradicional del millonario, sus elecciones automovilísticas son, sin duda, una declaración de su carácter extravagante.
Uno de los detalles más peculiares que ha dejado perplejos a sus seguidores y a los transeúntes por igual es su peculiar hábito de conducir descalzo, a lo vagabundo. Las cámaras han capturado repetidamente a él saliendo de su Lambo sin zapatos, con un par de zapatos de lujo en la mano que solo se pone al salir del coche. Este gesto, lejos de ser un simple capricho, parece ser una extensión de su estética única y su declaración de independencia frente a las normas convencionales. ¿Quién necesita zapatos cuando conduces un coche que vale millones?
Su garaje lo ha logrado a otras cosas además de la abogacía
Además de ser abogado, Ilian Tobianah también trabaja como modelo para marcas de moda y alta joyería, consolidando aún más su imagen de «Zeus» moderno. En las redes sociales, su alias encaja perfectamente con su aura de misterio y poder; con su melena y barba al viento, y su porte altivo, la comparación con el dios griego es innegable. Entre París y Monte Carlo, siempre rodeado de un séquito de personas que incluye a varias modelos, él ha construido un mundo que parece salido de una novela.
Lo fascinante no es solo su habilidad para desafiar las normas de la apariencia o su colección que va de Lamborghini a Bentley, sino cómo juega con la percepción pública para su beneficio. Su vida parece estar construida sobre una paradoja: un hombre que se presenta al mundo con la estética de un «vagabundo», pero que vive como un rey. Esta dicotomía es lo que le ha permitido acumular seguidores y admiradores, curiosos por saber más sobre este personaje que rompe con todas las convenciones sociales.
