Y al fin hubo reunión. Casi nueve meses más tarde de haberlo prometido, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha encontrado un hueco en su agenda para reunirse con la Junta Directiva de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles, ANFAC, con el fin de hablar de la situación que vive la Industria del automóvil en España y de las necesidades que esta tiene para potenciar su actual proceso de transformación. Muchas cosas de las que hablar en la agenda, pero pocas o casi ninguna solución o promesa para solventar los actuales problemas de la automoción en España.
El nuevo presidente de ANFAC, Josep María Recasens, y el director general de la asociación de fabricantes de automóviles, José López-Tafall, se reunieron ayer con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu; y el secretario de Estado de Asuntos Económicos y G-20, Manuel de la Rocha en el palacio de la Moncloa.
ANFAC pide «aprovechar la oportunidad existente»
Por fín, los altos directivos de ANFAC pudieron trasladar al Gobierno español de manera directa la necesidad que tiene España en general y su industria del automóvil en particular de aprovechar la oportunidad existente de liderar la transformación de la movilidad. Una reunión largamente demanda por parte del sector del automóvil, cuya demora en producirse motivó la dimisión del anterior presidente de la asociación de fabricantes, Wayne Griffiths, ante la desidia del Gobierno en su convocatoria.
El nuevo presidente de ANFAC, Josep María Recasens, ha aprovechado la oportunidad para recordar al Gobierno español que “la reindustrialización del sector español del automóvil con la llegada del vehículo eléctrico, conectado y autónomo no implica sólo a la fabricación y ensamblaje de los automóviles. Es una transformación trasversal donde el vehículo va a ser un eje de riqueza para todos los sectores de la sociedad como son los operadores de recarga, compañías tecnológicas, energéticas y todo el ecosistema de start-ups y de economía circular. La automoción se ofrece para liderar ese proceso creador”.
Mantener y mejorar la competitividad de la Industria
Desde ANFAC, su presidente trasladó al presidente Sánchez que tanto ”España como el Gobierno de España tienen en la nueva movilidad europea una oportunidad histórica que permitirá mantener y mejorar la competitividad de la industria española, y reforzar nuestros empleos y fábricas”. Por ello incidió en la necesidad de aprovechar esta gran oportunidad y no dejar pasar el momento: “Si no cogemos este tren, nuestros socios europeos crearán campeones tecnológicos con los que difícilmente podremos competir”.
En este sentido, Recasens trasladó al presidente y demás representantes del Gobierno de España presentes en la reunión “la voluntad del sector de seguir fomentando la colaboración público-privada en el despliegue de la movilidad eléctrica”. Sin ella, la industria española corre serio riesgo de ser superada por sus rivales y, por tanto, perder parte de su pujanza.
Preocupación por las limitaciones de emisiones de CO2
El presidente de ANFAC recordó igualmente a Pedro Sánchez la preocupación del sector por el endurecimiento de los objetivos de reducción de emisiones en la Unión Europea a partir de 2025, y, de ahí, la conveniencia de adoptar distintas medidas de impulso a la electrificación. Asimismo, trasladó la oferta de ANFAC de forjar una relación directa y colaborar en la elaboración de una estrategia de descarbonización que mantenga la importancia del sector y sus empleos en el nuevo ecosistema de la movilidad que se está creando.
En todo caso siguen siendo muchos los temas pendientes a tratar con el Gobierno relacionados con la Industria del Automóvil en España. El mercado español no ha terminado de recuperar sus niveles de matriculaciones previos a la pandemia y, en función de la evolución de las ventas, todo hace prever que este año también seguiremos por debajo de las registradas en 2019. El mercado necesita mayores garantías de seguridad y medidas que permitan a los consumidores poder acceder a unos vehículos, los eléctricos, cuyas ventas en lugar de incrementarse vienen reduciéndose frente a las del año anterior en los últimos meses.
Desde el Palacio de La Moncloa se ha informado de cómo «el presidente del Gobierno. Pedro Sánchez, ha trasladado el compromiso decidido del Ejecutivo para trabajar, junto a las asociaciones del sector, en garantizar la reindustrialización y descarbonización de la economía a corto y largo plazo. Para el Gobierno, descarbonizar la industria y la movilidad es un mandato económico y social, compartido con la Unión Europea».
El comunicado de presidencia del Gobierno también indica que «Pedro Sánchez y el nuevo presidente de ANFAC han coincidido en la voluntad común de continuar fomentando la colaboración público-privada en el despliegue de la movilidad eléctrica».
Por último, la nota emitida desde La Moncloa indica que «el Gobierno presentó a finales de junio un nuevo paquete de apoyo al vehículo eléctrico y conectado, que supone un esfuerzo adicional de impulso a la demanda, incluyendo medidas de carácter fiscal, económico y destinado a facilitar la instalación de puntos de recarga, por valor de 626 millones euros. De hecho, la puesta en marcha de estas nuevas políticas eleva a unos 2.500 millones de euros las ayudas para impulsar la movilidad eléctrica en España»
Tras leer tanto el comunicado de ANFAC como el emitido por presidencia del Gobierno, la sensación que apenas queda en el aire es que se han emitido buenas palabras pero que, en principio, no se han adoptado ni parece que se vayan a adoptar a corto plazo nuevas medidas que permitan a la industria española del automóvil prepararse mejor y afianzar sus posiciones en el contexto global en los próximos años.
Igualmente, tampoco parece que, a corto plazo, vayan a adoptarse medidas que permitan dinamizar el mercado y sacarlo de su actual atonía, En definitiva, buenas palabras, buena predisposición y buen ánimo, pero nada mas, al menos de momento. Situación que mantiene a la expectativa de la evolución de los acontecimientos a la industria española
Seat/Cupra «corre peligro» por los aranceles al Tavascan
El propio expresidente de ANFAC, Wayne Griffiths, presidente de SEAT, alertaba ayer mismo en la presentación a los medios de su nuevo modelo Terramar de que tanto SEAT como Cupra “corren peligro” a causa del impacto que los nuevos aranceles impuestos por la Unión Europea a los modelos producidos en China pueden tener en la economía de la empresa. Según Griffiths, con el nivel actual de los mismos la venta de otro de sus modelos producido en China, el Tavascán se produce ya “a pérdidas”.
Para el presidente de SEAT, si no se modifican los aranceles del 21% impuestos a SEAT y, en concreto, al Tavascan, este modelo estaría en peligro de continuidad. “Si el coche alcanza el éxito al que tiene que llegar, en el peor de los casos nos veremos obligados a tener que reducir la producción en España”, en la factoría de la marca en Martorell (Barcelona).
Posibles reducciones en la producción
Griffiths recordó la importancia que el Tavascan tiene, tanto para la marca como para el propio Grupo Volkswagen, de cara al cumplimiento de la normativa europea en materia de limitaciones de emisiones de CO2. Sin este eléctrico, el Grupo Volkswagen se vería obligado a tener que reducir su producción de modelos con motores de combustión, lo que sin duda tendría importantes repercusiones en sus factorías, Martorell entre ellas.
El presidente de Seat también mencionó que la UE impuso los aranceles para evitar una avalancha de coches chinos baratos; pero nuestro modelo no es barato y se trata de un diseño europeo, desarrollado aquí, aunque se fabrique en China”. Por todo ello, Griffiths entiende que la situación del Tavascán, al igual que la de otros modelos en sus mismas condiciones, debe tener un carácter especial y ser considerada como tal.
Para el alto ejecutivo de Seat/Cupra resulta “incomprensible” que “una marca española con un coche diseñado aquí” se vea forzada a tener que hacer frente al pago de un arancel que está por encima de otras empresas no europeas que también produce sus modelos en China. Una clara referencia, a la situación de Tesla, aún sin citar directamente a la marca norteamericana.
Preocupación por la actual situación del mercado
Griffiths también mostró su “preocupación” por la situación actual del mercado, en especial por la del “mercado del coche eléctrico, que no arranca”, Según comentó el presidente de SEAT /Cupra, “en 2026 tendremos volúmenes muy altos de un coche eléctrico pequeño y no podemos seguir con estos niveles (de ventas)».
En este sentido, el presidente de ambas marcas españolas criticó abiertamente el modelo existente de ayudas a la compra de los vehículos eléctricos vigente en España, y exige introducir cambios en las mismas que permitan dinamizar el mercado. En concreto, pidió un variar el proceso de las mismas de tal forma que se permita que las subvenciones lleguen al consumidor en el momento en el que este compra su coche.