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Charles Leclerc es mejor en pista que en la calle: así chocó su Ferrari Purosangue

El pasado fin de semana fue memorable para Charles Leclerc, el joven piloto monegasco de Fórmula 1 que compite con Ferrari. Él consiguió una destacada victoria en el Gran Premio de Italia, el «circuito de casa» para la escudería del Cavallino Rampante, en Monza. Sin embargo, no todo fue brillante para el piloto fuera de la pista, ya que un video viral en TikTok ha mostrado un pequeño accidente que tuvo con su Ferrari Purosangue mientras circulaba por las estrechas calles de su natal Mónaco.

Se puede ver al nacido en Mónaco en su Purosangue, de color plata, circulando por las famosas calles del principado. Todo parece normal hasta que, en una de las curvas más emblemáticas del Principado, conocida por ser la más lenta del calendario de F1, el piloto no calcula bien la distancia y termina impactando ligeramente con otro vehículo. Aunque el choque fue leve y no causó mayores daños, este suceso ha dado de qué hablar.

El video del choque de Charles Leclerc

El video del accidente ha sido editado de manera humorística, con el famoso audio del propio Leclerc diciendo «I am stupid» después de un accidente que tuvo en el Gran Premio de Azerbaiyán 2019, cuando se estrelló contra el muro en la estrecha curva del castillo en Bakú. La inclusión de este audio ha generado una ola de comentarios y memes, que han aportado un tono divertido al incidente, en lugar de convertirlo en un motivo de crítica.

Los fans han utilizado este momento para recordar que, aunque los pilotos de Fórmula 1 son increíblemente hábiles en sus trabajos, también son personas que enfrentan situaciones comunes. En las calles, los pilotos no solo deben tener en cuenta la velocidad y las curvas cerradas, sino también otros factores como el tráfico, la presencia de peatones y las restricciones de espacio.

Una lección para todos los conductores

Una lección para todos los conductores

Aunque el accidente no pasó a mayores, nos recuerda la importancia de mantener la atención y respetar las distancias de seguridad, independientemente de la experiencia al volante. Charles Leclerc, al igual que cualquier otro conductor, subestimó por un momento la distancia en una curva complicada y terminó chocando. Afortunadamente, en esta ocasión, no hubo daños significativos ni para su deportivo ni para el BMW involucrado.

Este curioso incidente subraya la diferencia entre los desafíos que enfrentan los pilotos de Fórmula 1 en las pistas y los que encuentran en la vida cotidiana. En los circuitos, el piloto está en su elemento, manejando bajo condiciones controladas y a velocidades extremas. En las calles de Mónaco, sin embargo, debe lidiar con un entorno impredecible y más restrictivo.