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Kia no se corta ni con cristales y saca los colores a BMW con su K5 GT

Los anuncios publicitarios en Estados Unidos están un paso por delante que en el resto del mundo. Y los del sector automovilístico no son menos que el resto. Para ejemplo el último anuncio de la marca coreana Kia, que no se ha cortado a la hora de anunciar al otro lado del océano su nuevo K5 GT, una emocionante berlina que es capaz de plantar cara a toda una institución en el segmento como lo es BMW Serie 5. Y así nos lo quieren demostrar. Bueno, ellos directamente no, porque Kia ha contratado a la empresa independiente AMCI, que es quien enfrenta a estos dos vehículos.

Para ponernos en situación, comparar un BMW Serie 5 con un Kia K5 no es de recibo desde el minuto uno en términos de posicionamiento. Pues lo correcto hubiera sido comparar la berlina coreana con el hermano pequeño del de Múnich, el BMW Serie 3. Sobre todo con el estirón que recibió el modelo alemán en esta última generación hasta llegar a los 5,06 metros de longitud. Porque vienen a ser 16 centímetros más de lo que mide el modelo coreano, que al otro lado del océano cuesta prácticamente la mitad que el alemán.

El Kia K5 GT cuesta casi la mitad que un BMW 530i

Y es que en Estados Unidos se pueden comprar uno de estos Kia K5 GT desde 33.090 dólares (29.780 euros), mientras que el BMW 530i elegido para la comparativa por la casa coreana parte desde los 57.900 dólares (52.110 euros). Esa diferencia económica ya juega un papel clave en la berlina coreana, que presume de tener una cifras de prestaciones que nada tienen que envidiar a las del alemán. Todo gracias a que los K5 GT esconden un 2.0 T-GDI con 294 CV de potencia y 420 Nm de par motor, mientras que esa versión del BMW Serie 5, que no se vende en España, recurre a un 2.0 TwinPower Turbo con 258 CV de potencia y 400 Nm de par motor.

Ambos tienen un cambio automático de 8 velocidades (convertidor de par en BMW y doble embrague en Kia), mientras que el alemán es propulsión trasera y el coreano, también 200 kilos más ligero, tracción delantera. Todo ello hace que sus cifras de aceleración de 0 a 60 millas por hora (96 km/h) sean casi calcadas, con 5,5 segundos para el 530i y con 5,4 segundos para el K5 GT, que también se lleva la victoria a la hora de analizar su comportamiento dinámico, porque en curva soporta una aceleración lateral de 0,93 g en lugar de los 0,90 que admite la berlina alemana.