Los coches con cambio manual siguen siendo los reyes de la carretera en España, a pesar del auge de los automáticos. Pero muchas veces estos automóviles manuales sufren averías que pueden ponernos en una situación complicada. Una de las más temidas es que se rompa el embrague, porque entonces ¿cómo cambiamos de marcha? Por suerte, los taxistas y conductores experimentados tienen un truco para seguir adelante incluso cuando el embrague falla. Te contamos cuál es.
1El embrague: una pieza vital y frágil
El embrague es un componente crítico en los coches manuales. Al accionar este pedal, se desacopla temporalmente el motor de la transmisión, permitiendo el cambio de marchas con fluidez. Pero este proceso genera fricción constante, lo que deriva en que tarde o temprano el embrague se desgaste y acabe fallando. La situación empeora en coches antiguos, que son la mayoría en España.
Mantener el embrague en buen estado es esencial. Para ello, conductores como los taxistas aplican prácticas como minimizar el tiempo que se mantiene pisado el embrague o evitar dejar el pie apoyado sobre el pedal. Pero cuando el embrague deja de funcionar de repente, es común que un conductor entre en pánico. ¿Qué hay que hacer en caso de que el embrague falle mientras conducimos?