El artesanal constructor británico RML Group saltó a la palestra cuando hace más de tres años anunció su intención de construir su impresionante Short Wheelbase, que no es otra cosa que una reinterpretación en pleno Siglo XXI del legendario Ferrari 250 GT SWB. Ahora bien, las artes de dicha empresa van mucho más allá. Y claro ejemplo es este extraordinario RML P39 40th Special Edition, un superdeportivo que toma como punto de partida un modelo de la firma de Zuffenhausen, pero del que esperan construir 10 unidades.
Como dejan claro con su denominación, este RML P39 40th Special Edition ha sido confeccionada para conmemorar los 40 años de historia del constructor británico. Y ese ‘regalo’ que se han hecho lo han bordado. Primero por elegir la base de un impresionante Porsche 911 Turbo S para dar forma a su criatura, nacida con un objetivo en el horizonte y que no es otro que el poder dar una vuelta al circuito alemán de Nürburgring en un tiempo de 6 minutos y 45 segundos. Para que lo tengas en cuenta, eso son 4 segundos más rápido que un 911 GT3 RS y 32 segundos más rápido que el 911 Turbo S elegido como base.
Los bólidos de Le Mans inspiran el diseño de este RML P39 40th Special Edition
Michael Mallock, director ejecutivo de RML Group, dijo que su objetivo con el P39 40th Special Edition era crear un automóvil que «eclipsara cómodamente a un 911 GT3 RS en Nordschleife y que, al mismo tiempo, fuera relajante y fácil de conducir durante todo el camino de regreso a casa».
Aunque estéticamente este extraordinario RML P39 40th Special Edition guarda una estrecha relación con el ‘nueveonce’ desde el que nace, lo cierto es que la compañía británica ha concebido desde cero todos los paneles de su carrocería con fibra de carbono e inspirándose en los actuales bólidos que compiten en Le Mans. Del ‘donante’ conserva los grupos ópticos, los espejos retrovisores, los tiradores de las puertas… Y el interior.
Una aerodinámica propia del mundo de la alta competición
Porque la compañía británica ha instalado unos pasos de rueda mucho más anchos, un sinfín de nuevos componentes aerodinámicos activos, así como una zaga estirada al más puro estilo ‘longtail’. De ahí que este RML P39 40th Special Edition es 170 milímetros más largo y 90 milímetros más ancho que un 911 Turbo S. Otras cotas a tener en cuenta es que su distancia entre ejes se estira 15 milímetros y las vías se ensanchan 100 milímetros.
Como no podía ser de otra manera, la nueva carrocería de este impresionante RML P39 40th Special Edition tiene su propia razón de ser, que no es otra que optimizar la aerodinámica si la comparamos con un Porsche 911 Turbo S. Tanto es así que la compañía británica asegura que su joya puede generar 2.035 libras (923 kilos) cuando circula a 285 km/h, cifra que deja en evidencia las 450 libras (204 kilos) que ofrece un 911 Turbo S. Otro dato a tener en cuenta es que a 240 km/h, esta criatura genera 1.460 libras (662 kilos) de carga aerodinámica, superando las 1.360 libras (617 kilos) de un 911 GT3 RS.
912 CV y 1.000 Nm para este RML P39 40th Special Edition
Pero estas cifras de carga aerodinámica solo se van a poder alcanzar cuando el afortunado propietario de uno de estos RML P39 40th Special Edition active el programa Track Mode. Como alternativa se ofrece el Tour Mode, que modifica esos apéndices aerodinámicos para que sean menos agresivos, al igual que eleva la altura libre al suelo gracias a unos amortiguadores hidráulicos, de forma que se vuelve algo más dócil para circular por vías abiertas al tráfico. Eso sí, siempre con ojo para no reducir a escombros sus sensacionales y aerodinámicas llantas de 20 pulgadas al frente y de 21 pulgadas en la parte trasera. Por cierto, estas calzadas con neumáticos 275/35 R20 y 335/30 R21 respectivamente.
Semejantes neumáticos serán los responsables de transmitir al asfalto las extraordinarias cifras que genera su corazón 3.8 Bóxer Biturbo, el mismo que usan los Porsche 911 Turbo S, pero exprimido para alcanzar los 912 CV de potencia y los 1.000 Nm de par motor en este RML P39 40th Special Edition gracias a la llegada de dos nuevos turbocompresores, un intercooler más contundente, un escape artesanal, catalizadores más permisivos o una nueva gestión electrónica. Eso son 262 CV y 200 Nm más que los entregados de origen, que se digieren por medio de un cambio automático PDK de 8 velocidades.
Más rápido y efectivo que el Porsche 911 Turbo S del que nace
De ahí que no nos debería sorprender que este RML P39 40th Special Edition sea capaz de acelerar de 0 a 60 millas por hora (96 km/h) en 2,4 segundos, mientras que las 100 millas por hora (161 km/h) las alcanza en 4,5 segundos desde parado. Para que lo tengas en cuenta, eso son 0,2 y 0,8 segundos menos que lo que necesita un Porsche 911 Turbo S, del que esta criatura hereda al milímetro su equipo de frenos, con discos de material carbocerámico que tienen 420 milímetros delante y 390 milímetros detrás. Por cierto, ‘mordidos’ por unas pinzas con 10 y 4 pistones respectivamente.
También de un Porsche 911 Turbo S, este espectacular RLM P39 40th Special Edition hereda el interior, debidamente aderezado según apuntan con nuevos tapizados que el cliente podrá personalizar al milímetro. También verán llegar unos arneses de seguridad de cuatro puntos, mientras que los dos testimoniales asientos traseros han cedido su espacio a una jaula de seguridad.
RML fabricará 10 unidades y sólo la conversión son unos 600.000 euros
Como te podrás imaginar, hacerte con uno de los 10 RML P39 40th Special Edition que la casa británica va a construir de forma artesanal en sus instalaciones de Wellingborough no te va a salir nada barato, porque están pidiendo por dicha conversión la friolera de 495.000 libras (unos 600.000 euros al cambio), cuantía a la que además vas a tener que sumar los pertinentes impuestos, sin olvidarnos de un extraordinario Porsche 911 Turbo S que se usará como ‘donante’.
