A diferencia de la impresionante y revolucionaria mecánica híbrida enchufable que los chicos de Sant’Agata Bolognese han elegido para el sucesor del Huracán, estos han sido bastante discretos cuando hablamos del chasis del Lamborghini Temerario, porque semejante criatura se sustenta en una plataforma realmente sofisticada, pero que no es tan avanzada como la que tiene su hermano mayor, el Lamborghini Revuelto.
Y es que ese imponente Lamborghini Revuelto nace desde un chasis de fibra de carbono, material que también emplean algunos de los adversarios más duros de este nuevo Lamborghini Temerario, cuya estructura es una brillante evolución de la utilizada por su antecesor, alma gemela del también desaparecido Audi R8. De ahí que el chasis de este superdeportivo esté fabricado de forma íntegra en aluminio. Pero aluminio de grado espacial y capaz de soportar las estratosféricas prestaciones de las que presume esta máquina que combina un corazón 4.0 V8 Biturbo junto a tres propulsores eléctricos para generar un total de 920 CV de potencia.
El Lamborghini Temerario se sustenta sobre un chasis de aluminio espacial
Según el director técnico de la firma de Sant’Agata Bolognese, Rouven Mohr, el nuevo bastidor espacial sobre el que se sustenta el nuevo Lamborghini Temerario tiene un 50% menos de componentes que el chasis utilizado por el Huracán. También hay un 80% menos de soldaduras térmicas si se compara con el Huracán, pero a pesar de todo ello este bastidor espacial proporciona un 25% más de rigidez torsional. De ahí que la casa italiana hable de que se ha conseguido mejorar el comportamiento dinámico y el confort de marcha.
Como hemos dicho anteriormente el 4.0 V8 Biturbo que se sustenta en el centro del chasis de este Lamborghini Temerario genera 800 CV de potencia entre 9.000 y 9.750 rpm. Aunque lo que es realmente sorprendente es que su línea roja se posicione en las 10.000 rpm, todo ello sin olvidar de que su par motor es de 730 Nm. Junto a sus tres motores eléctricos, su batería de iones de litio con 3,8 kWh de capacidad, su sistema de tracción a las cuatro ruedas y su cambio automático de doble embrague con ocho velocidades, esta criatura presume de poder acelerar de 0 a 100 km/h en solo 2,7 segundos y puede llegar hasta los 343 km/h.