Este Porsche 911 Turbo de 1985 es una preparación original de la época llevada a cabo por DP Motorsport para adoptar el estilo del Porsche 935 de carreras de resistencia. Esta unidad en concreto fue exportada a EE. UU. ese mismo año y, ya en 2008, fue adquirida por Paul Krause, ex jugador profesional estadounidense de fútbol americano y miembro del Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional.
Con su carrocería pintada en Indischrot y su interior tapizado en colores tostado y marrón, va propulsado por el habitual motor bóxer de seis cilindros turbo en versión de 3,3 litros, acoplado a la caja de cambios manual de cuatro velocidades habitual de la época, capaz de resistir más par motor que la de cinco relaciones.
Porsche 911 Turbo DP 935 II: Algo más que un kit estético
DP (Design + Plastics) fue fundada en 1973 por Ekkehard Zimmerman y más tarde comenzó a construir piezas de carrocería para los Porsche de competición del equipo Kremer Racing, incluido el K3 ganador de las 24 Horas de Le Mans de 1979. Durante ese período, DP también comercializó sus propias interpretaciones de calle para el Porsche 911 inspiradas en el 935 de competición, bautizadas como DP 935 I y DP 935 II.
Este Porsche 911 Turbo DP 935 II fue entregado a DP, donde recibió una carrocería de morro “de pato” con faros abatibles, antinieblas, salidas de refrigeración para el radiador de aceite en los laterales del capó, alerones delanteros y trasero, faldones laterales y espejos retrovisores aerodinámicos. Esta unidad cuenta además con un techo corredizo, limpiaparabrisas trasero, cristales tintados y topes protectores del parachoques traseros. Si bien su aspecto general es bueno, un análisis más detallado muestra desconchones y grietas en la pintura.
Las llantas BBS modulares de 15″ con la tapa central acabada en color dorado muestran algunos raspones y montan neumáticos Pirelli P6000 215/60 en el eje delantero y unos enormes Pirelli P Zero Asimmetrico 345/35 en la zona trasera; la medida típica del Lamborghini Countach. El equipo de frenos consta de discos ventilados y perforados en las cuatro ruedas. El motor se reconstruyó en 2020, y en marzo de 2024 se le practicó un cambio de aceite y de batería. El vendedor adjunta manuales de propietario, registros de servicio, informe de Carfax y permisos de circulación de Minnesota.
Interior de lujo y competición en este Porsche 911 Turbo
Un vistazo al interior nos permite comprobar cómo esta unidad mezcla un amplio equipamiento para la época con detalles propios de un automóvil de competición. Los asientos delanteros cuentan con calefacción y ajuste eléctrico, hay aire acondicionado, un autorradio JVC con lector de CD, elevalunas eléctricos, alarma Alpine y luneta térmica trasera.
Eso en cuanto al confort, porque los detalles racing también abundan. El más llamativo es una palanca de cambios WEVO, que acorta los recorridos un 30 % respecto a la palanca original y aumenta su precisión. También encontramos un repartidor interaxial manual de frenada, volante Personal Fittipaldi, un tacómetro que registra 10.000 rpm y un velocímetro tarado a un máximo de 200 mph (322 km/h) con la marca DP, así como indicadores de presión de aceite, temperatura de aceite, nivel de aceite, nivel de combustible y presión de sobrealimentación. El odómetro de seis dígitos muestra 55.000 millas (88.512 km), de las cuales aproximadamente 13.000 millas (20.921 km) fueron recorridas por el actual propietario.
Y ahora viene lo mejor: el motor bóxer de seis cilindros de 3,3 litros sobrealimentado por turbocompresor fue modificado por Kremer Racing con culatas rabajadas, un turbocompresor K27 de presión máxima regulable, un intercooler sobredimensionado y sistemas de engrase y alimentación de combustible de mayor capacidad. El motor se reconstruyó en agosto de 2020 con nuevos cilindros, pistones, cojinetes, juntas y conductos de aceite.
Se reconstruyeron el turbocompresor y la válvula de descarga, se mecanizaron las culatas y se reparó y rectificó el cigüeñal. La bomba de combustible fue también reacondicionada, y se sustituyeron la bomba de aceite, el depósito de carbón activo que recoje los vapores de la gasolina, las bujías, los cables de encendido y la tapa y el rotor del distribuidor del encendido. Todo ello no ha evitado que el vehículo presente una fuga de aceite alrededor del turbocompresor.
Por su parte, la caja de cambios fue reconstruida en 2009, fecha en la que se instaló un kit de embrague de repuesto, así como un nuevo volante de inercia. También se ha reemplazado el silenciador, y el sistema de escape se reparó mediante soldadura en 2020.
Está claro que este Porsche 911 Turbo 930 con look y cierto pedigrí del Porsche 935 va a requerir algo de inversión para dejarlo en estado de concurso y para mantenerlo si su dueño decide usarlo, pero no es menos cierto que se trata de una atractiva preparación de época que no deja de tener su mérito en la era de los restomods. Actualmente este Porsche 911 Turbo DP 935 II se está subastando on-line a través de la web de Bring A Trailer, y la puja máxima en el momento de escribir estas líneas está en 48.000 dólares, equivalentes a poco más de 45.000 euros.