Si eres propietario de un Honda Odyssey, Pilot, Fit, HR-V o un Acura MDX del año 2013 con pintura en ciertos tonos de blanco, como White Diamond Pearl, Taffeta White, White Orchid Pearl o Bellanova White, es posible que te encuentres en medio de un problema creciente. Una demanda colectiva presentada en California alega que los acabados en estos colores tienen un defecto de fabricación que provoca descascarillado, burbujas y delaminación, dejando a los vehículos con un aspecto deteriorado y desigual.
La demanda asegura que estos problemas se deben al proceso de pintura en tres etapas utilizado por Honda, que aparentemente no garantiza la durabilidad esperada para un automóvil. Según los demandantes, estos defectos estaban presentes desde la fabricación, aunque no se manifestaron hasta después de un tiempo de uso. Alegan, además, que Honda debió informar a los compradores sobre el riesgo de estos problemas al momento de la venta, algo que no sucedió.
El antecedente negativo de Honda con problemas de pintura
No es la primera vez que la marca japonesa enfrenta críticas por problemas de pintura en sus vehículos. De hecho, la compañía emitió en su momento boletines técnicos y extensiones de garantía para ciertos modelos afectados por estos mismos defectos. Sin embargo, los propietarios afirman que estas medidas fueron insuficientes y que muchos vehículos han quedado expuestos a daños visibles que afectan tanto la estética como el valor de reventa.
Lo que agrava la situación es que los problemas de pintura no están limitados a ciertas regiones o condiciones climáticas, ya que se han reportado en todo Estados Unidos. La demanda indica que los vehículos afectados fueron fabricados principalmente entre 2013 y 2017 en la planta de Honda en Lincoln, Alabama, utilizando un sistema de pintura robótico. Además, argumenta que Honda estaba al tanto del defecto, ya que se recibieron múltiples quejas directamente y a través de foros y sitios en línea que la empresa monitorea.
El reclamo de los propietarios a Honda
En 2018, Honda ya enfrentó una demanda colectiva similar en Canadá, también relacionada con problemas de pintura en sus vehículos. Aquella disputa terminó en 2022 con un acuerdo de 27 millones de dólares, lo que demuestra que este tipo de situaciones no es nuevo para la marca. Ahora, los propietarios en Estados Unidos exigen que se les compense no solo por los costos de reparación, sino también por las pérdidas económicas asociadas con estos defectos.
La demanda busca un juicio con jurado y una serie de compensaciones que incluyen el reembolso por los trabajos de pintura, daños compensatorios y punitivos, y la restitución total del valor perdido. Si tienes un Honda de los modelos y colores mencionados, puede que sea el momento de revisar tu vehículo y considerar unirte a esta acción legal colectiva.