En invierno, las carreteras se transforman en un desafío constante: la lluvia, el hielo y la niebla conspiran para poner a prueba nuestras habilidades al volante y, sobre todo, la confiabilidad de nuestros vehículos. De todas las partes de un coche, hay una que juega un papel crucial en nuestra seguridad: los neumáticos.
Sin embargo, según un estudio del Real Automóvil Club de España (RACE) y Goodyear, 1,5 millones de vehículos en España circulan con neumáticos en mal estado. Esto no solo compromete la seguridad del conductor, sino también la de todos los usuarios de las vías.
1Neumáticos: los guardianes invisibles de la carretera

Pese a su papel esencial, los neumáticos suelen ser ignorados en el mantenimiento regular del coche. Son el único punto de contacto entre el vehículo y el asfalto, lo que significa que su estado determina directamente la capacidad de frenado, el agarre en curvas y la estabilidad en maniobras repentinas.
En invierno, este papel es aún más crítico. Euromaster estima que hasta un 30% de los accidentes de tráfico en esta estación están relacionados con neumáticos en mal estado. Condiciones como el aquaplaning, la falta de adherencia en superficies heladas o el tiempo de frenado prolongado pueden marcar la diferencia entre un susto y una tragedia.