Conducir un coche eléctrico es una experiencia revolucionaria, pero cargarlo puede ser un desafío para los principiantes. Entre los tipos de conectores, velocidades de carga y nuevas dinámicas en estaciones públicas, es fácil sentirse abrumado. Sin embargo, como todo, la práctica lleva a la perfección. Aquí te explicamos cómo enchufar tu coche eléctrico de manera eficiente y sin arruinar tu instalación eléctrica.
1Entendiendo la carga: Una analogía con agua
Imagina que cargar tu coche eléctrico es como llenar un recipiente con agua. Si usas una manguera pequeña, llenarás un balde sin problemas, pero intenta llenar una piscina te llevará días. Lo mismo ocurre con las baterías de los coches eléctricos: hay baterías pequeñas (como las de un híbrido enchufable) y baterías grandes (como las de un Tesla). Además, no todas las mangueras (o cargadores) son iguales.
Tu hogar, por ejemplo, está diseñado para demandas eléctricas domésticas básicas. Si conectas el coche a un enchufe estándar, la velocidad de carga será lenta, ideal para emergencias pero no para uso diario. En cambio, un wallbox doméstico puede aumentar la velocidad de carga al proporcionar un mayor flujo de energía, convirtiendo la «manguera» en una más potente.
