La rotura de una tubería del Canal Isabel II en Alcorcón ha desencadenado una situación complicada para los vecinos, especialmente para quienes aparcan sus coches en el garaje subteráneo afectado. Este incidente, ocurrido en la confluencia de la calle Sapporo con la avenida José Aranda, ha provocado la inundación de un garaje de tres plantas y ha dejado más de un centenar de vehículos gravemente dañados. Ante esta situación, los vecinos, en coordinación con bomberos y policía, han comenzado a recuperar sus coches mientras intentan lidiar con las consecuencias.
El proceso de recuperación de los vehículos ha comenzado después de que los bomberos finalizaran las labores de achique, extrayendo unos 85.000 litros de agua acumulada en las primeras dos plantas. Los residentes de la planta -1 fueron los primeros en acceder al garaje, con el apoyo de las autoridades, para sacar sus coches. Sin embargo, los problemas estructurales detectados en algunas zonas del garaje están retrasando el acceso completo a la planta -2, donde se están reforzando muros dañados. Por otro lado, la planta -3, la más afectada, permanece inaccesible, y los vehículos allí estacionados podrían tardar varios días en ser retirados.
Los requisitos para reclamar a las aseguradoras que se hagan cargo de los daños en el coche
Ante este panorama, los propietarios de los coches se enfrentan a la tarea de gestionar los daños causados por el agua. El administrador del garaje ha instado a los vecinos a contactar con sus aseguradoras para tramitar las reclamaciones. Para ello, deben incluir el número de expediente proporcionado por el Canal Isabel II, que servirá como referencia oficial del incidente. Este paso es fundamental para garantizar que los afectados puedan recibir las indemnizaciones correspondientes y cubrir los costes de reparación o reemplazo de sus vehículos.
La preocupación de los residentes no es infundada, ya que no es la primera vez que ocurre un incidente similar en la zona. Hace apenas unos meses, en noviembre de 2024, otra rotura de una tubería también causó estragos en Alcorcón, dejando a los vecinos sin suministro eléctrico y de agua. Este precedente pone de manifiesto la urgencia de revisar y mejorar las infraestructuras para evitar futuras averías de esta magnitud.
En búsqueda de soluciones…
Mientras tanto, los vecinos afectados buscan soluciones inmediatas para minimizar las pérdidas. Algunos optan por secar y limpiar sus coches, especialmente si solo estuvieron parcialmente sumergidos, mientras que otros evalúan si es necesario llevarlos a un taller especializado. En los casos más graves, donde el motor o el sistema eléctrico han sufrido daños, el reemplazo del vehículo podría ser inevitable.
Este incidente subraya la importancia de la prevención y la pronta respuesta ante emergencias. Aunque la coordinación entre los vecinos, los bomberos y las autoridades locales ha sido efectiva, queda mucho por hacer para garantizar la seguridad y la tranquilidad de quienes dependen de infraestructuras subterráneas en su vida cotidiana. En Alcorcón, la comunidad espera que este episodio sirva como una llamada de atención para prevenir futuras tragedias.
