Aparcar en un aeropuerto nunca es tarea sencilla, especialmente cuando no se sabe cuánto tiempo se estará fuera. Pero lo que ha ocurrido en el aeropuerto de Berlín es un caso fuera de lo común: un Volkswagen Golf ha permanecido estacionado en la entrada principal durante más de 365 días sin que nadie reclame su propiedad. El misterio se agrava cuando se observa el estado del coche: ruedas de repuesto, un cabrestante y restos de comida en su interior, sugiriendo que alguien lo abandonó apresuradamente.
Este aparcamiento en el aeropuerto de Berlín ofrece los primeros 10 minutos de estacionamiento gratuito, pero cada hora adicional cuesta 23 € (24 $), lo que eleva la tarifa diaria a 552 € (573 $). Tras más de un año en el mismo sitio, la deuda acumulada asciende a más de 200.000 € (207.700 $), una cifra absolutamente desproporcionada en comparación con el valor de mercado del Golf, que es al menos 66 veces menor. Sin embargo, pese al enorme costo del ticket de parking, las autoridades no han podido localizar al propietario ni tomar medidas concretas sobre el vehículo.
No encuentran al dueño el Golf
El caso ha captado la atención de los medios de comunicación, pero la falta de respuestas es evidente. APCOA Deutschland GmbH, la empresa encargada de la gestión del estacionamiento, ha intentado contactar con las autoridades, pero hasta ahora no han logrado dar con el dueño del coche. La policía local ha optado por no intervenir, argumentando que el automóvil no se encuentra en una vía pública, por lo que no está bajo su jurisdicción. Además, aunque el número de bastidor del vehículo es visible, no parece que nadie haya realizado una búsqueda para identificar al propietario.
Las hipótesis sobre el abandono del Volkswagen Golf son diversas. Una de las teorías más plausibles es que el coche pudo haber sido utilizado en un delito y posteriormente dejado en el aeropuerto para evitar que se rastreara su origen. También existe la posibilidad de que el dueño original haya huido del país por razones desconocidas o que simplemente se haya olvidado de su existencia, aunque esto último parece poco probable dada la cuantiosa suma adeudada.
Un caso que no es poco común en los aeropuertos
A pesar de que los aeropuertos suelen lidiar con coches abandonados, lo habitual es que estos se encuentren en los aparcamientos de larga duración, donde eventualmente son subastados si nadie los reclama. En este caso, sin embargo, el Volkswagen Golf ha permanecido en un área altamente transitada y expuesta sin que ninguna autoridad haya tomado cartas en el asunto. APCOA ha señalado que el cobro de la tarifa dependerá de si pueden identificar al deudor y de si este cuenta con los recursos para pagar.
Este caso también plantea dudas sobre la seguridad en los aeropuertos. Resulta sorprendente que un coche haya permanecido más de un año en un área tan visible sin que se hayan tomado medidas para removerlo. En cualquier otro contexto, un vehículo en estas condiciones habría sido remolcado en cuestión de días. La pasividad de las autoridades sugiere fallos en los protocolos de seguridad y control, dejando abierta la posibilidad de que incidentes similares puedan ocurrir en el futuro sin que nadie intervenga.