El circuito Nürburgring Nordschleife, conocido como el «Infierno Verde», ha marcado un antes y un después en su historia con una decisión que ha dejado a los motociclistas fuera de sus sesiones de Touristenfahrten. A partir de ahora, las motos no podrán rodar libremente en este icónico trazado durante estas sesiones abiertas al público, una medida que ha sido justificada principalmente por razones de seguridad, pero que también podría responder a intereses económicos.
Durante décadas, los vehículos de dos y cuatro ruedas han compartido el asfalto del Nordschleife, generando una dinámica intensa y, en ocasiones, conflictiva. Mientras los coches buscan mejorar tiempos y poner a prueba su potencia, los motociclistas han disfrutado de la adrenalina y el desafío técnico que representa la pista. Sin embargo, la coexistencia entre ambos ha derivado en incidentes que han obligado al circuito a replantear su apertura para las motos.
¿Por qué las motos ya no pueden andar por el circuito de Nürburgring?
La seguridad es la razón principal esgrimida por la administración del circuito. Según medios especializados como Bridge to Gantry, los accidentes de motocicletas en las sesiones de Touristenfahrten no solo ponen en peligro la integridad de los pilotos, sino que también conllevan interrupciones prolongadas en la pista. La necesidad de asistencia médica inmediata en estos casos obliga a cerrar el circuito durante largos periodos, afectando a los demás usuarios y, lo que es más importante para la administración, al flujo de ingresos que genera cada jornada de rodaje.
La frustración por estas interrupciones no solo ha afectado a los aficionados que acuden al circuito, sino también a las empresas de alquiler de automóviles que operan en Nürburgring. Un instructor de la pista mencionó que las cancelaciones recurrentes debido a accidentes de motociclistas han generado descontento entre los clientes y pérdidas económicas para los negocios que dependen del tiempo efectivo de pista. Esto ha llevado a un malestar creciente que finalmente ha influido en la drástica decisión de excluir a las motos de estas sesiones.
¿Qué sucederá con los que ya sacaron el pase de temporada en el circuito alemán?
Para los motociclistas que ya habían adquirido pases de temporada, la administración ha ofrecido dos opciones: continuar usando su pase en el trazado del Gran Premio de Nürburgring o solicitar un reembolso en el centro de información del circuito. Sin embargo, esta medida no compensa la pérdida de la oportunidad de rodar en uno de los circuitos más desafiantes del mundo, un sueño para muchos entusiastas de las dos ruedas.
La decisión podría generar un efecto dominó en otros circuitos europeos que también enfrentan problemas similares. Mientras los motociclistas buscan nuevas alternativas para vivir la experiencia de la velocidad en entornos seguros, la exclusión del Nordschleife marca un cambio significativo en la relación entre el motociclismo y los circuitos históricos. La mítica pista alemana, que ha visto a los más grandes pilotos desafiar sus curvas y rectas, ahora cierra una puerta importante para el motociclismo, dejando un legado en el que las motos han sido protagonistas, pero al que ahora solo podrán decir: ‘Auf Wiedersehen’.