Las riadas son fenómenos naturales que pueden ocurrir de manera repentina y representar un grave peligro para los conductores. En muchas ocasiones, las lluvias torrenciales o el desbordamiento de ríos convierten las carreteras en auténticas trampas mortales.
La mejor recomendación siempre será evitar atravesarlas, pero en una situación extrema, conocer los pasos adecuados puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. A continuación, te explicamos cómo actuar si te ves obligado a cruzar una riada con tu coche y qué medidas puedes tomar para maximizar tus posibilidades de salir ileso.
1Evaluar la situación antes de actuar
Lo primero que debes hacer si te encuentras ante una riada es evaluar cuidadosamente la situación antes de tomar cualquier decisión. Aunque el agua pueda parecer poco profunda, es importante recordar que incluso una corriente de apenas 30 centímetros puede arrastrar un coche pequeño, y 60 centímetros pueden hacer lo mismo con un todoterreno o una furgoneta.
Si el nivel del agua es demasiado alto o la corriente es muy fuerte, lo más seguro es no arriesgarse. En estos casos, es preferible buscar una ruta alternativa o esperar a que el nivel del agua descienda. Observar si otros vehículos han logrado cruzar con éxito puede darte una idea de la profundidad y la velocidad de la corriente, aunque cada coche y cada situación son diferentes. Es crucial recordar que el agua en movimiento es extremadamente peligrosa y que, en la mayoría de los casos, intentar cruzarla puede tener consecuencias fatales.
