Tres de cada cuatro conductores consideran que las carreteras españolas están en mal estado, con baches y un firme muy irregular, según un estudio de la Fundación CEA (Club Europeo de Automovilistas). Esa percepción negativa lógicamente se corresponde con la realidad, porque cada vez hay más baches, grietas y hasta falta de iluminación.
Estos problemas se deben a una increíble falta de mantenimiento y de inversión en las autovías españolas. Además, la lluvia, el hielo y la nieve del invierno empeoran las carreteras, y es justo lo que ha pasado por las fuertes lluvias en España en las últimas semanas. Y no solo afecta a la experiencia de conducción, sino que está demostrado que aumenta el riesgo de sufrir una avería o un accidente.
1Aumenta el riesgo de sufrir un reventón
Uno de los grandes riesgos de los baches en la carretera es que es fácil sufrir un reventón en los neumáticos y, de hecho, aumenta la probabilidad. Así lo ha explicado el Grupo Andrés, distribuidor de neumáticos, que afirma que aumentan hasta un 17% los daños que provocan los socavones.
Pasar por encima de un bache, sobre todo a alta velocidad, hace que se resienta la estructura interna del neumático y que aumente el riesgo de sufrir un reventón, en el momento e incluso días o meses después. De hecho, los baches de las carreteras españolas están detrás de muchos accidentes que se producen a alta velocidad, porque los neumáticos son el único elemento que está en contacto con el asfalto.
Por tanto, si has pasado por encima de un bache a alta velocidad y has notado que ha podido comprometer la estructura, lo primero es valorar los daños exteriores en un taller. Y si está dañado, es necesario reemplazar los dos neumáticos del mismo eje, pues es la única solución para prevenir un reventón que provoque un accidente grave.
