Las rotondas se han convertido en un elemento habitual en las carreteras de todo el mundo. Aunque en muchos casos facilitan la circulación y reducen los accidentes, también pueden generar confusión y atascos en ciertas situaciones. Además de su función vial, muchas de ellas se han hecho famosas por su ornamentación, albergando desde esculturas hasta aviones de combate, coches y hasta un cementerio, como ocurre en la localidad madrileña de Villanueva de la Cañada.
Sin embargo, a pesar de la gran cantidad de glorietas que pueblan nuestras carreteras, España no es el país que más tiene en el mundo. Hay otro país que cuenta con un número mucho mayor y que han encontrado en estas construcciones una estrategia perfecta para evitar los atascos en las grandes ciudades de su territorio.
¿Cuál es el país con más rotondas?
El récord lo ostenta Francia, con un total de 42.986 rotondas repartidas por todo su territorio. Además de liderar en número absoluto, también se posiciona en primer lugar en cuanto a la cantidad per cápita, con 663,8 glorietas por cada millón de habitantes. Entre las más icónicas se encuentra la famosa Place de l’Étoile en París, donde se erige el majestuoso Arco del Triunfo y por la que circulan miles de vehículos diariamente.
Detrás de Francia se sitúa Reino Unido, con 25.976 glorietas. Entre ellas destaca la singular «rotonda mágica» de Swindon, que está formada por una principal con cinco minis en su interior, un diseño que, aunque puede parecer caótico, permite gestionar el tráfico de manera eficiente. En el tercer puesto del ranking se encuentra Italia, con 18.172 rotondas. Una de las más famosas es la Piazza Venezia en Roma, un punto neurálgico de la capital italiana que conecta varias avenidas principales.
¿Cuántas rotondas hay en España?
España ocupa la cuarta posición, con 15.053 rotondas. Algunas de las más conocidas son la Glorieta de Bilbao en Madrid o la Ronda de Atocha. En los últimos años, el aumento de estas en el territorio español ha sido significativo, sobre todo en nuevos desarrollos urbanísticos y en vías de circunvalación, donde han sustituido a muchas intersecciones reguladas por semáforos. A pesar de ello, todavía hay muchas personas que no se sienten cómodas al circular por ellas, lo que genera retenciones y maniobras peligrosas en algunas de las más transitadas.
El quinto lugar en este ranking lo ocupa Brasil, con 11.854, demostrando que este tipo de infraestructura no es exclusiva de Europa. En el país sudamericano, las glorietas han sido una solución eficaz para mejorar el flujo vehicular en ciudades con un tráfico especialmente denso, como São Paulo y Río de Janeiro.