No es la primera vez que hablamos de los Porsche 912 de Kamm. Estas creaciones parten siempre de un Porsche 912 original. Los ingenieros de Kamm restauran y modifican cada vehículo donante dejándolo como si acabara de salir de fábrica. La carrocería se sustituye por una de fibra de carbono, mientras que el chasis, los frenos, las suspensiones y los neumáticos reciben las preceptivas mejoras de un buen restomod, a la vez que otros componentes se sustituyen por recambios originales.
Kamm, la empresa fundada por Miklós Kázmér en Budapest, Hungría, se centra exclusivamente en la primera serie del Porsche 912 (1965-1969). La idea es tomar como punto de partida el más ligero de los Porsche 911/912 de carretera, que además cuenta con un mejor equilibrio interaxial de masas, al ser su motor más ligero.
La carrocería Targa de los Porsche 912
Tremendamente populares, las versiones Targa de los Porsche 912 y 911 tienen su origen en EE. UU. La popularidad de los deportivos descapotables en aquel mercado era enorme, y a mediados de los años sesenta, Estados Unidos se planteó prohibir este tipo de carrocerías por razones de seguridad. La idea acabaría aparcada, pero en Porsche se anticiparon desarrollando la carrocería Targa, con un arco antivuelco y una luneta trasera que se desmontaba junto con la sección central del techo.
Para desarrollar esta preparación se ha partido de un Porsche 912 Targa original de 1968 de especificaciones europeas y documentación belga. Se ha restaurado meticulosamente y ha sido acabado en color Tangerine propio de la época con un interior de cuero tabaco e inserciones Porsche Pasha.
No faltan unas llantas réplica de las de época, faros delanteros Cibie, portaequipajes de carbono y una tabla de surf especialmente diseñada para la ocasión. El interior también incluye un sistema de audio de alta calidad completamente camuflado.
Fibra de carbono a cascoporro para el Porsche 912 Targa de Kamm
Como ocurre con todas las preparaciones de Kamm, los paneles del Targa están fabricados con fibra de carbono, al igual que el icónico arco antivuelco, material que se extiende a los retrovisores exteriores y los asientos. Por su parte, las ventanillas están fabricadas con resina de policarbonato (Lexan), ligero y resistente a los arañazos. Además, la carrocería está convenientemente reforzada, y opcionalmente puede encargarse una jaula antivuelco con especificaciones FIA.
Al igual que los demás Kamm, el motor original 616/36 B4 de 1,6 litros y 90 CV refrigerado por aire ha crecido hasta los 2,0 litros, y cada componente se beneficia de la obsesiva atención al detalle del equipo. La potencia se ha incrementado hasta llegar a los 185 CV, con un par de 205 Nm, si bien se alcanzan los 170 Nm a sólo 2.000 rpm para permitir el uso cotidiano del vehículo, todo ello con los niveles de fiabilidad que cualquier conductor esperaría de una mecánica moderna y un régimen máximo de giro de 7.200 rpm.
Al igual que con todos los Porsche 912 Kamm, cada Targa se fabricará según las especificaciones elegidas por el propietario, con opciones ilimitadas de pintura e interior y diversas configuraciones técnicas para elegir, como la relación final del cambio. Y si no quieres esperar, puedes hacerte con esta edición exclusiva de lanzamiento, que está disponible por 395.000 euros y se puede entregar en cualquier parte del mundo.
Miklós Kázmér explica que el vehículo “se fabrica ahora para clientes de todo el mundo, desde Estados Unidos hasta Australia y desde Europa continental hasta el Lejano Oriente. Muchos clientes potenciales viven en zonas con un clima estupendo y quieren experimentar todo lo que un Kamm tiene para ofrecer. Con eso en mente creé el Kamm 912c Targa. Basado en el Targa de ventanillas blandas, conserva el aspecto clásico original pero es un auténtico Kamm en cada centímetro”.