Una de las grandes ventajas de comprar un vehículo de ocasión es que pagamos menos por él, pero a pesar de ello en muchos casos es necesario financiar coche, en especial si adquirimos uno con pocos años y una cifra de km baja.
De esta forma, lo más común es la financiación en los coches de segunda mano, una manera de adquirir un automóvil que presenta varias ventajas sobre pagarlo “a tocateja” como se dice coloquialmente.
1. Se obtienen mejores precios
A los concesionarios les interesa vender un coche financiado, ya que suelen trabajar con empresas que dan estos fondos a los compradores. Eso hace que vendan más y que ganen más dinero porque se llevan una parte de la operación, del coste de los intereses.
Incluso es posible que la financiera pertenezca al concesionario y por eso siempre vamos a obtener un mejor precio si decidimos pagar el coche a plazos que si lo abonamos en uno solo.
Los descuentos son muy interesantes, por lo que es muy probable que la mejor opción sea la de pagar en cómodos plazos mensuales.
2. Cuotas muy asequibles
Lejos quedan las cuotas elevadas, ya que ahora vamos a poder comprar un coche desde 150€ al mes, una cantidad que está al alcance de cualquier persona que tenga una nómina.
Este es un importe bajo que nos va a permitir tener un coche en propiedad por muy poco dinero al mes, con todas las ventajas que eso nos aporta, por ejemplo, lo a la hora de encontrar un nuevo empleo.
3. No necesitamos dar entrada
Ahora mismo existe la posibilidad de financiar un coche de segunda mano sin aportar ni un euro de entrada, lo que nos viene muy bien cuando no tenemos ahorros.
Así, el no disponer de una cantidad inicial deja de ser un hándicap y siempre que tengamos ingresos podemos traernos un automóvil a casa, el que más nos guste teniendo en cuenta nuestra nómina.
4. Conservamos los ahorros
Se puede dar la situación de que tengamos los ahorros suficientes para pagar el coche de ocasión que nos gusta sin la necesidad de solicitar que nos presten el dinero. En ese momento, lo normal es que nos planteemos si lo pagamos o pedimos financiación.
Lo mejor suele ser lo segundo, pues vamos a poder adquirir el automóvil a un precio menor y los ahorros seguirán estando en nuestra cuenta corriente, por si nos hacen falta para un imprevisto, o por si los queremos invertir mientras hacemos frente a la cuota mensual con el dinero que obtenemos por nuestro trabajo.
5. Es posible que tengamos acceso a alguna oferta o regalo
Ya solo el descuento inicial por abonar nuestro coche a plazos es una buena razón para hacerlo de esta forma, pero es que, además, en muchos concesionarios pueden ofrecernos alguna oferta especial.
Por ejemplo, no son raros los pequeños regalos como las alfombrillas y similares, y tampoco es extraño que nos paguen alguna pequeña revisión, hagan una de diagnóstico pasados unos meses sin cobrarnos nada o incluso se ofrezcan a realizar gratis (o a precio muy reducido) el primer cambio de aceite.