El Ferrari F40 es un caso de estudio. Está claro que se trata de un modelo icónico, el último superdeportivo analógico, el vehículo más potente y rápido de su época, el más salvaje “grupo B” de calle, uno de los mejores diseños de Pininfarina, la entrada por la puerta grande de Ferrari en la era turbo, el último superdeportivo desarrollado con Enzo Ferrari aún vivo… Son innumerables los motivos para desear una una unidad en buen estado. Pero lo sorprendente es cómo los peores ejemplares son igualmente codiciados.
Éste es el caso del Ferrari F40 con número de chasis ZFFGJ34B000088538 que RM Sotheby’s va a subastar dentro de unos días en Monterrey y por el que espera alcanzar una puja máxima de entre 1.750.000 y 2.300.000 euros, un modelo cuyas cotizaciones se han disparado en los últimos años a pesar de que constantemente aparecen unidades en las subastas.
Otro aspecto interesante sobre las cotizaciones del Ferrari F40 es que su demanda ha crecido mucho en EE. UU., que es donde este vehículo alcanza las cotizaciones más altas, por lo que no es de extrañar que RM Sotheby’s haya decidido poner a la venta esta unidad en el transcurso de la próxima semana del motor de Monterrey (California), a pesar de que hasta ahora esta unidad había pasado su vida en Europa.
El Ferrari F40, en contexto
El Ferrari F40 nació para trasladar a la carretera el desarrollo del Ferrari 288 GTO Evoluzione del Grupo B, prematuramente abolido, con la excusa de celebrar el 40.º aniversario de Ferrari. Basado en un chasis tubular con áreas de fibra de carbono creado para la competición, recibió una carrocería magistralmente dibujada por Pietro Camardella bajo la dirección de Leonardo Fioravanti –empleados ambos por Pininfarina–, fabricada con paneles de aramida (Kevlar) y fibra de carbono.
Detrás del conductor se encontraba un V8 biturbo de 2,9 litros acoplado a un cambio manual de cinco velocidades comandado con la clásica palanca guiada por una rejilla metálica. Sus 478 CV y 576 Nm le permitían hacer el 0-100 km/h en 4,1 segundos y lograr 324 km/h de velocidad máxima, cifras de récord para la época.
Entre 1987 y 1992 se fabricaron en torno a 1.200 unidades. En España se vendía oficialmente por 40.000.000 de pesetas, equivalentes a 240.405 euros, y prácticamente todos los Ferrari F40 salieron de Maranello pintados en Rosso Corsa; incluida la unidad que será subastada en breve por RM Sotheby’s.
La dura vida de este Ferrari F40 Minty Forty
Así, el chasis 88538 se terminó de fabricar el 27 de febrero de 1991 y fue entregado por el concesionario Auto Becker, de Düsseldorf (Alemania) en mayo de ese mismo año a su primer propietario, Dieter Wolf, quien participó en diversos eventos de Ferrari con el vehículo. Tres años más tarde pasó a manos de Arnold Gardemann, entonces presidente del Club Ferrari alemán y conocido coleccionista, quien en 1998 se vio implicado en un accidente con el F40. Un comprador holandés se hizo con el siniestro y encargó su reparación a Forza Service, en los Países Bajos, quienes devolvieron el vehículo a su estado de fábrica reemplazando la zona delantera de la carrocería.
Con otra reparación en el umbral de una puerta, un reemplazo del odómetro por haber dejado de funcionar y un par de cambios de manos más (en 2014, en subasta, y en 2017 en una venta entre particulares), este Ferrari F40 fue adquirido por su actual propietario en 2021, quien lo mandó desmontar, revisar y repintar en Verde Pallido, en homenaje al Ferrari 250 GTO construido para Sir Stirling Moss que finalmente competiría en las 24 Horas de Le Mans de 1962 con Innes Ireland y Masten Gregory. Para complementar el color exterior, el interior rojo original fue retapizado en azul.
Schaltkulisse se ha encargado de su mantenimiento desde 2022, los depósitos de combustible se reemplazaron en aquel año, y también ha recibido un reciente cambio de la correa de la distribución. En el momento de catalogarlo, se han recorrido un poco más de 31.000 kilómetros con este Ferrari, aunque el cambio de odómetro hace que esta cifra sea cuestionable.
Así que ahora los compradores californianos tienen la oportunidad de pujar por un Ferrari F40 reparado tras un siniestro, repintado en un color no original, retapizado en un color igualmente apócrifo y con un kilometraje incierto. Las tres unidades del Ferrari F40 subastadas en lo que va de 2024 han superado los tres millones de euros, algo que es poco probable que suceda en el caso de este ejemplar, si bien el mercado de los Ferrari F40 está tan al alza que… ¿quién sabe?
