La compañía francesa Alpine está lista para meter en un contenedor su impresionante Alpine A110 Pikes Peak para enviarlo directamente en un viaje en avión hasta Colorado, Estados Unidos. Todo ello para enfrentarse por vez primera en su historia a la impresionante ‘carrera hacia el cielo’ y conseguir el sueño americano de vencer Pikes Peak. Pero antes de que eso ocurra, la firma francesa lo ha puesto a punto algo más cerca de su hogar en Dieppe, Francia.
Desde que la compañía francesa anunciara este proyecto para enfrentarse por vez primera a Pikes Peak, mucho se ha venido hablando de este impresionante Alpine A110 Pikes Peak, que ahora podemos ver en pleno apogeo por carreteras de los Alpes franceses luciendo su inconfundible decoración, inspirada también en la que lucen los monoplazas de la escudería francesa en Fórmula 1.
El Alpine A110 Pikes Peak pesa 950 kilos y tiene 500 CV
Estas imágenes también permiten ver los impresionantes componentes aerodinámicos y piezas de fibra de carbono que han sido creados especialmente para la ocasión. Sin embargo, para concebir este Alpine A110 Pikes Peak, la casa francesa tomó como punto de partida un A110 GT4 Evo, una criatura exclusiva para circuito que entre otros, presume de arrojar un peso de 1.080 kilos. Esa cifra era un lastre importante para esta versión, de manera que los ingenieros de Alpine se esforzaron por arañar hasta el último gramo y dejar esta joya en unos más que ajustados 950 kilos.
Estos ingenieros también trabajaron en su motor, pieza clave para enfrentarse con garantías a la ‘carrera hacia el cielo’. Curioso sin duda es que hayan mantenido el corazón 1.8 TCe que anima a todos y cada uno de los Alpine A110 que salen de Dieppe, aunque este motor ha sido debidamente llevado a otro nivel, porque dicen que proporciona unos 500 CV de potencia. Y eso es prácticamente el doble de lo que ofrece en su versión de acceso, en la que entrega 252 CV. Pero esa cifra alcanza los 300 CV en los conocidos A110 GT, A110 S y A110 R. Por si no fuera suficiente, también ha sido adaptado para funcionar a la perfección a gran altura.
Raphael Astier se pondrá al volante de este Alpine A110 Pikes Peak
“Con un inicio a una altitud de 2.800 metros y un final a 4.400 metros, las demandas sobre el suministro de energía son enormes, ya que perdemos 100 milibares de presión tan pronto como subimos 1.000 metros”, explica el director del proyecto, Francois Letort. “El objetivo era mantener la misma cantidad de energía durante todo el ascenso sin pasarse”.
Este impresionante Alpine A110 Pikes Peak será pilotado por Raphael Astier, quien ya compite con un Alpine A110 Rally y quien además posee un récord en la categoría Time Attack 1 de Pikes Peak. El ha sido quien lo ha puesto a punto y quien ya lo ha conducido por las serpenteantes carreteras de los Alpes donde le han dado los últimos retoques antes de llevarlo hasta Estados Unidos.
Alpine quiere vender sus futuros coches eléctricos en EE.UU.
“Las primeras carreras fueron muy bien”, dijo sobre la experiencia. “Hicimos pruebas durante tres días en Francia y los resultados fueron extremadamente positivos. El coche es muy ágil y fácil de conducir. El chasis se adhiere al suelo, el motor parece prometedor y la pérdida de peso hace que el Alpine sea aún más dinámico de lo que ya es naturalmente. Se siente muy ligero y receptivo, con una dirección muy directa y sin demoras en los cambios. Ahora tenemos que confirmar estas buenas sensaciones en otras carreteras y alturas, pero nuestro debut ha sido más que positivo y tengo confianza”.
También es cierto que el propio Astier ha confirmado que su objetivo no es ganar Pikes Peak, pero que buscarán lograr un buen resultado. Todo ello para ayudar a la compañía francesa a introducirse en el mercado norteamericano con su futura gama de deportivos eléctricos de próxima generación.