Hace unos días, os contábamos que el coche con el competirá Carlos Sainz en el próximo Dakar, el RS Q e-tron, ya se está probando en diferentes zonas de Marruecos. Ahora, la firma de los cuatro aros nos devela todos los detalles de su interior, que recuerda a la cabina de un avión, con pantallas y displays que se extienden a lo ancho del salpicadero.
Originalmente, en los rallies se establecía una clara división de tareas: el piloto conduce y el copiloto navega. Ahora, estos papeles han cambiado. En la actualidad el reglamento limita las tareas de navegación con opciones y reglas muy precisas, y el antiguo roadbook en papel para seguir el recorrido ahora es digital. Con su concepto de control y manejo, el nuevo Audi RS Q e-tron redistribuye varias funciones entre el conductor y el copiloto.
Carlos Sainz, Mattias Ekström y Stéphane Peterhansel tan solo tendrán que manejar el volante, acelerar y frenar, ya que no tienen que cambiar de marcha porque el sistema de propulsión eléctrica con convertidor de energía no requiere de una transmisión manual. En el centro se ubica la palanca del freno de mano, que está acoplada al innovador sistema brake-by-wire y que combina el freno hidráulico con un sistema de recuperación de energía. Pero la principal función del freno de mano en los rallies es inducir el deslizamiento del coche antes de las curvas mediante un breve bloqueo de las ruedas traseras que obliga al coche a girar.
A la vista del conductor
Delante del conductor, en el volante, hay ocho botones que controlan cosas como el claxon, los limpiaparabrisas y las entradas de datos en el software si el piloto quiere registrar una anomalía en el sistema mediante una marca de tiempo en la memoria. Detrás del volante, se ha incorporado una pantalla que proporciona información sobre la presión de los neumáticos, el sentido de la marcha y la velocidad actual.
Entre el conductor y el copiloto, hay una pantalla que ofrece información sobre la presión de los neumáticos, el reparto de frenada, el sistema brake-by-wire y otras funciones. La información se resalta en color verde si los sistemas funcionan correctamente, o en rojo cuando se produce un error. Debajo de esta pantalla se localiza un panel de instrumentos que maneja el copiloto, a requerimiento del piloto. Además de su tarea principal, que es la navegación, el control de estos sistemas ha de hacerse de forma impecable mientras se circula por terrenos accidentados a velocidades de hasta 170 km/h.
El cockpit se completa con el sistema Iritrack, para los primeros auxilios en caso de emergencia. Con ello, la organización registra la velocidad, la posición actual del vehículo y puede detectar posibles accidentes.
