El Audi Quattro no necesita presentación. El que posiblemente sea el modelo más icónico de Audi nació en 1980 para demostrar al mundo que la tracción total podía aportar mucho a los automóviles que conducimos a diario.
El caso es que todo era revolucionario en este modelo: su ensanchada carrocería fastback, su esquema de suspensiones traseras independientes, su motor sobrealimentado por turbocompresor y, por supuesto, su sistema de tracción total. Se trataba de un vehículo que dinamitaba los cánones de la época y que, además, iba a escribir algunas de las páginas más gloriosas en la historia del deporte del motor.
La historia del Audi Sport Quattro
El motor era una evolución de la unidad de cinco cilindros y 2,1 litros que había sido estrenado por el Audi 200, potenciado en el quattro con un turbocompresor KKK que le permitía alcanzar los 200 CV en versión de calle, potencia que llegaría hasta los 598 CV en su versión de Pikes Peak o a los 750 CV según reconocería años más tarde Walter Röhrl.
Pero lo más interesante era el desarrollo del sistema de tracción total inspirado en el del Volkswagen Iltis, la clave que hizo que el Audi Quattro cosechara dos títulos de constructores y otros dos de pilotos en el Campeonato del Mundo de Rallys (WRC).
Tras haber logrado grandes éxitos con el Audi Quattro original, Audi desarrolló el Sport Quattro “especial de homologación”. Uno de los principales objetivos del Audi Sport Quattro fue lograr el mayor ahorro de peso posible, ya que el Audi Quattro original nació pesado, y eso era algo que le restaba mucha competitividad en los tramos del mundial. El Audi Quattro Sport estrenaba un motor con bloque de aluminio de 2.133 cm3 con una nueva culata de 20 válvulas con doble árbol de levas. La potencia máxima, en la versión de calle, ascendía a 306 bhp (310 CV).
Paralelamente, el chasis acortaba su batalla para ganar agilidad, y en la carrocería se empleaba Kevlar para las alas, el techo y el faldón delantero. Los frenos ABS se introducían de serie en la versión de calle, y sus prestaciones eran comparables a las de los superdeportivos de la época, con 257 km/h de velocidad punta y alrededor de cinco segundos en la aceleración de cero a 100 km/h.
Parece ser que se fabricaron únicamente 214 unidades del Audi Sport Quattro, de las cuales 164 se vendieron a clientes particulares como coches de calle, mientras que 20 fueron empleadas por Audi Sport para competir oficialmente. Las restantes 30 unidades se quedaron también en manos de Audi para fines experimentales y de desarrollo.
El palmarés de esta unidad del Audi Sport Quattro
Preparado por Audi Sport y pilotado en sus orígenes por el campeón del mundo de rallys Hannu Mikkola, este Audi Sport Quattro de 1984 tiene entre su palmarés las victorias en los rallys de Gales y de Gran Bretaña de 1986. Con la icónica matrícula “44 WMN”, Mikkola también estableció un nuevo récord en la carrera de montaña de la subida de la colina Shelsey Walsh.
Más allá de sus logros deportivos, este histórico Audi Sport Quattro ha aparecido ampliamente en vídeos, libros, artículos e informes de rallys, así como en anuncios de Audi y Hella, por lo que forma parte de la iconografía popular.
Durante un tiempo, Audi UK decoró el Audi Sport Quattro “44 WMN” en color plateado para celebrar el cincuentenario del asalto de Hans Stuck a la colina de Shelsey Walsh al volante del V16 Auto Union Grand Prix de 5,3 litros, si bien en la actualidad ha recuperado el patrón decorativo original de con el que se presentó cuando fue conducido por Mikkola en los rallys de Gales y Gran Bretaña.
Tras su restauración, este famoso Audi Sport Quattro se exhibió en numerosos eventos como el NEC (el salón del automóvil de la competición por excelencia), y fue conducido por otro campeón mundial de rallys, Ari Vatanen, para un evento promocional.
Este Audi Sport Quattro ha sido, además, un competidor habitual en el Festival de la Velocidad de Goodwood, donde lo condujeron el propio Hannu Mikkola y Stig Blomqvist. También ha participado en el Manx International Rally, y tanto Mark Higgins como Malcolm Wilson lo han pilotado en una exhibición en Croft.
Este Audi Sport Quattro puede ser tuyo
El próximo 14 de julio, Bonhams subastará esta unidad en el propio festival de Goodwood. El actual propietario lo adquirió, también en subasta, en diciembre de 2003, y desde entonces ha sido sometido a extensos trabajos para devolverlo a su estado original, si bien cuenta con algunas modificaciones de calado como el reemplazo de la jaula de protección de aluminio original por una de acero, más resistente.
Reconstruido por Lehmann Motorentechnik AG en 2010 con un coste de cerca de 10.000 euros, el motor ha aumentado su cilindrada a 2,3 litros y desarrolla 554 CV. La caja de cambios de grupo corto y cinco velocidades limita su velocidad máxima a 185 km/h, lo que deja intuir el nivel de aceleración del vehículo, cercano al de un Fórmula Uno de la época.
En 2009 Alan McNish probó el Audi Sport Quattro 44 WMN en Silverstone para The Sunday Times. El tres veces ganador de Le Mans declaró que “Tan pronto como el turbo se pone en marcha, tienes un ruido enorme y el coche sale disparado hacia adelante […] Esperaba que tuviera una fuerte aceleración debido al grupo corto, pero no esperaba que tuviera esa aceleración. Pensé que iba a ser más progresivo, pero fue cero y luego absolutamente todo”.
Más recientemente, el Audi Sport Quattro fue probado de nuevo en Race Retro, Stoneleigh (Reino Unido) para la edición de abril de 2017 de la revista Audi Driver. Desde entonces, este pedacito de historia de la automoción se mantiene en un garaje con clima controlado.
El lote a subastar incluye gran cantidad de repuestos, así como las copias de los artículos mencionados. Bonhams espera recaudar entre 1,2 y 1,4 millones de libras por este pedacito de historia del automóvil con ruedas, cantidad equivalente a entre 1,39 y 1,62 millones de euros. Nos parece una valoración excesiva teniendo en cuenta el escaso palmarés del vehículo. No obstante, es muy difícil valorar un ejemplar así teniendo en cuenta que apenas se fabricaron 20 unidades (de las que varias han pasado a mejor vida), y raramente salen a la venta.
En cualquier caso, se trata de un vehículo que dará caché a cualquier colección o museo donde sea acogido. Ahora, sin más, te invitamos a que disfrutes de sus fotos en la galería que encontrarás a continuación.