Hemos visto y (casi) tocado el Dacia Sandrider, el prototipo con el que la firma rumana propiedad de Renault se estrenará en el rally Dakar. Para conocer más detalles sobre este ambicioso proyecto deportivo nos hemos desplazado al Nasser Racing Camp, la finca que el piloto catarí Nasser Al-Attiyah posee en la localidad bagenca de Castellfollit del Boix, un idílico entorno montañoso en el interior de la provincia de Barcelona.
Pero, vayamos al grano. El Dacia Sunrider es un prototipo de competición para rally-raid encuadrado en la categoría T1+, la que agrupa los vehículos de máximas prestaciones junto con la clase T1e, creada para dar cobertura al ya retirado Audi RS Q e-tron E2 quattro con el que Carlos Sainz ganó, a principios de este año, su cuarto Dakar.
A pesar de que se trata de un nuevo contendiente, hereda todo el saber hacer de Prodrive, que lleva compitiendo con su Hunter desde 2021, inicialmente encuadrado en la categoría T1 para posteriormente actualizarse a las especificaciones menos restrictivas de los T1+. Pero, ¿qué es en realidad un T1+?
Así es, técnicamente, el Dacia Sandrider que aspira a ganar el Dakar 2025
Las especificaciones más importantes de la clase T1+ creada por la FIA se resumen básicamente en vehículos con una anchura máxima de 2,30 metros (ojo, que es mucho), con neumáticos de 37’’ (unos 94 cm de diámetro), suspensiones con 35 cm de recorrido máximo, un peso mínimo de 2.000 kilos y motores que ofrecen en torno a 400 CV.
En la práctica, todos los modelos emplean chasis tubulares, y en el caso del Dacia Sandrider, la experiencia y el saber hacer de Prodrive a lo largo de cuatro rallys Dakar puede percibirse fácilmente con sólo mirar la peculiar ubicación de sus dos ruedas de repuesto, en los laterales de la carrocería (para acceder rápidamente a ellas) y en posición inclinada hacia dentro para hacer sitio a los componentes de las suspensiones traseras.
Una observación algo más detallada nos permite comprobar que los brazos inferiores de las suspensiones (que son idénticos tanto delante como detrás para facilitar la logística y las reparaciones en carrera) son exactamente iguales a los del Hunter, y ambos trenes motrices cuentan con sólidos conjuntos de doble amortiguador por cada rueda.
Sobre esta estructura encontramos una carrocería de fibra de carbono con líneas rectas y formas futuristas que promete ser extremadamente aerodinámica y refleja perfectamente la identidad estilística de Dacia, heredando algunas de las líneas del prototipo Dacia Manifesto, muy alejadas de las líneas orgánicas dibujadas por Ian Callum –ex diseñador de Jaguar– para el Hunter.
Pero si la carrocería hermana claramente al Dacia Sandrider con el Manifesto, las similitudes entre ambos se desvanecen al analizar sus sistemas de propulsión. El motor eléctrico del primero deja paso a un más que probado propulsor V6 biturbo de tres litros que, con la preceptiva brida de admisión instalada por la normativa, entrega 360 CV a 5.000 rpm y un par máximo de 539 Nm a 4.250 rpm, potencia y par que se distribuyen a las cuatro ruedas de forma permanente tras haber sido convenientemente desmultiplicados por una caja de cambios secuencial de 6 velocidades.
La alineación del Dacia Sandrider para el rally Dakar
Por el momento, sólo hemos podido contemplar la primera unidad de forma estática, detrás de una cinta, pero esta “maqueta” se pondrá a rodar muy pronto para hacer sus primeros tests en el Château de Lastours, en Portel-des-Corbières, al sur de Francia, donde los fabricantes franceses y algunos equipos prueban tradicionalmente sus vehículos de raids.
La idea es que el vehículo debute oficialmente en el rally de Marruecos, que se disputará entre el 4 y el 11 de octubre, si bien Nasser Al-Attiyah ya ha anunciado su intención de competir en la Baja España Aragón, que se llevará a cabo entre el 26 y el 28 de julio.
Y es que el piloto catarí ganador de cinco Dakares será una de las estrellas de un equipo Dacia que alineará otros dos vehículos más: uno para Sébastien Loeb y otro para Cristina Gutiérrez. Los tres pilotos Red Bull aspirarán a lo máximo en un Dakar en el que el Dacia Sandrider promete ser el favorito, toda vez que Audi no participará y que Ford llegará a la prueba con un Ranger Raptor completamente nuevo –desarrollado por Malcolm Wilson y M-Sport con el apoyo de Ford y la experiencia del desarrollo previo del preparador sudafricano Neil Woolridge Motorsport–, algo que en una prueba de la exigencia del Dakar es sinónimo de problemas.
Se da la circunstancia de que ni Loeb ni el Hunter han conseguido la victoria aún en el Dakar, si bien han estado cerca, mientras que Cristina sí es poseedora de una estatuilla de oro del tuareg dakariano, si bien en la categoría de side by sides.
Por su parte, Ford contará con la experiencia del tetracampeón Carlos Sainz y de Nani Roma, vencedor tanto en motos (2004) como en coches (2014), y aunque Toyota aún no ha movido ficha, sería raro que no plantara batalla a los desafiantes proyectos de Dacia y Ford. En cualquier caso y sin haberlo visto en movimiento, el Dacia Sandrider tiene buen aspecto, está bien “parido” y promete dar mucha guerra en el próximo Dakar.