Tras el Gran Premio de Baréin, Fernando Alonso alcanzó en Google el mayor pico de búsquedas en toda su historia como piloto, superando incluso sus años de títulos con Renault y aquel polémico 2007 con McLaren. Ciertamente, la Fórmula 1 disfruta de una popularidad superior a aquellos tiempos, pero la figura de Alonso ha está alcanzando una dimensión que empieza a superar su condición de mero campeón automovilístico por circunstancias personales excepcionales. Un fenómeno social, no solo en España, sino también fuera de nuestras fronteras. Y lo que llegará si Aston Martin confirma su nivel de competitividad en las próximas temporadas.
El podio de Alonso no llegó por un golpe de fortuna, sino por una extraordinaria actuación con la que superó a los dos Mercedes y a Carlos Sainz. Más si cabe, con el recordatorio de que camina hacia los 42 años. Para empezar, su último podio ha llegado veinte años después del primero logrado con Renault en Malasia en 2022. Ningún piloto ha sostenido semejante rendimiento en el arco de dos décadas en una Fórmula 1 donde la edad media de la parrilla ha bajado sensiblemente en estas últimas temporadas. Era su podio número 99.
Fernando Alonso, uno de los pocos pilotos que han llegado al podio con más de 40 años
El resultado de Shakir colocaba a Alonso en sexta posición dentro del listado histórico de podios en la Fórmula 1, a solo tres de Kimi Raikkonen, y encabezado por Lewis Hamilton con 156 podios y Schumacher con 155, delante a Vettel (120), y Alain Prost, con 106. El reciente podio de Alonso es solo su tercero desde 2014, confirmación de la resiliencia y determinación de Alonso en competición, ya que desde entonces no ha dispuesto de una máquina aspirante al escalón de la victoria. En la primera oportunidad que Aston Martin le ha ofrecido un monoplaza competitivo, Alonso no ha desperdiciado la oportunidad.
En Shakir, el asturiano también entraba en otro singular apartado en la historia estadística de la Formula 1: el de los veinte pilotos capaces de subirse al cajón por encima de los cuarenta años. Con la particularidad de que la mayoría de los presentes pertenecen casi en su integridad a la Formula 1 de los años 50 y 60. El último en entrar fue Michael Schumacher, que ocupa el puesto 12. El alemán logró su último podio con 43 años y 5 meses. De tal listado solo Schumacher y Alonso han participado en la Fórmula 1 en el actual siglo. Habría que viajar a los años ochenta del pasado año para encontrar ya como cuarentones más próximos a Mario Andretti y Jacques Laffite. Ambos contaban 42 años con su último podio. Si repitiera podio en 2024, Alonso superaría a ambos la próxima temporada.
Sin embargo, Fernando Alonso necesitaría participar en la temporada 2025 para adelantar a Schumacher y, por supuesto, necesitaría para entonces contar con un monoplaza competitivo. Aunque ya ha reconocido su intención de seguir compitiendo al menos tres años más como mínimo. En 2025 el equipo británico tendrá en pista un monoplaza desarrollado íntegramente en su nuevo túnel de viento, que entrará en funcionamiento el próximo año, por lo que será probable que Alonso intente capitalizar el trabajo desarrollado desde este 2023, siempre y cuando si las aptitudes físicas y mentales le permiten mantener el nivel actual, como también ha reconocido.
Aston Martin y Fernando Alonso pueden ser los animadores del campeonato
Sin embargo, el asturiano puede adquirir un papel más estelar si cabe en 2023 de confirmarse el nivel actual y la progresión que se espera del AMR23, un monoplaza aún adolescente que, al terminar la temporada, “habría cambiado unos tres cuartos de la primera versión”. Restan todavía muchos circuitos para contrastar la primera foto del presente campeonato, pero el rendimiento mostrado por Red Bull, Max Verstappen y el R19 hacen temer un monopolio. Es aquí donde Fernando Alonso y Aston Martin pueden jugar un estimulante papel para animar el campeonato en caso de que Red Bull repita actuaciones como la de Shakir.
El resultado de Bahréin, supuso el certificado de defunción del W13/14 de Mercedes. Después, Toto Wolff ordenó acelerar cambios radicales para modificar un monoplaza superado por Aston Martin en la primera carrera. Sin descartar la reacción de un equipo de su dimensión, la entrada en liza de Alonso y Aston Martin puede deparar emocionantes capítulos como los de Shakir con Hamilton y Russell. En el caso de Ferrari, dependerá del rendimiento del SF23, sobre todo en carrera. En el hipotético caso de que Red Bull juegue en una liga aparte, la llegada al grupo de cabeza de un piloto con el carisma mediático y deportivo de Fernando Alonso puede suponer un balón de oxígeno en 2023 para el campeonato y sus audiencias. Por no hablar del remoto caso de que Alonso y Aston Martin puedan aspirar al triunfo según evoluciona el AMR23 durante la temporada.
“Tenemos un par de áreas en las que tenemos que mejorar que no voy a compartir, pero creo que el punto más importante es que el Aston Martin es un nuevo coche, un nuevo proyecto”, declaraba Alonso al terminar el primer gran premio de 2023. “Es solo el comienzo, no es coche final, sino el primero del concepto que hemos cambiado durante el invierno. Algunos de los mejores equipos han mantenido el concepto del año pasado”, en referencia a Red Bull, Mercedes y Ferrari, “han mantenido las mismas formas, y han refinado ese concepto y han perfeccionado la base que tenían. Para nosotros era mucho más difícil, tuvimos que cambiar el 95 por ciento del coche, así que hay que aprender mucho más de él, y por nuestra parte”. En este sentido, Alonso también aludió como un factor de mejora a su propio pilotaje y al error cometido cuando intentó superar por primera vez a Hamilton, al no tener totalmente por la mano algunos elementos del AMR23, como el tacto de la dirección asistida.
“Confío en nuestro equipo, sé lo que están haciendo, así que esperamos mejorar pronto”. Como Fernando Alonso proclamaba en los tiempos de McLaren con gran optimismo y escasos resultados, quizás ahora pueda ser cierto que, por fin, “lo mejor está por llegar”. Y Google seguirá rompiendo techos históricos con Fernando Alonso cono el piloto en la pista, camino de imprimir un sello único en la historia de la Fórmula 1 y del automovilismo.