El 2 de octubre de 2020 Honda anunció su despedida de la Fórmula 1. Después de su tormentoso matrimonio y posterior divorcio con McLaren, el fabricante japonés se refugió en Toro Rosso en 2018, y luego en Red Bull. Habían logrado cinco victorias con el grupo austríaco en la era híbrida pero ningún título. A diferencia de los años 80/90 con McLaren, se marchaba por la puerta de atrás y sin títulos. La decisión se justificó por “una transformación en la industria automovilística que se da una vez en cien años”. 2021 sería su último año.
24 de mayo de 2023. Junto con los responsables de Aston Martin, Honda anunció su asociación a partir de 2026 con el equipo británico. Desde que anunciara su retirada, ha logrado dos títulos con Red Bull y Max Verstappen (2021,2022) y va camino del tercero. Durante este tempo, el consejo de administración del grupo japonés comprendió que había cometido un error y ha intentado corregirlo. Ahora, Aston Martin se convertirá en su equipo oficial. ¿Por qué semejante giro estratégico?
Para su temporada de despedida (2021), Honda decidió trabajar durante seis meses a fondo para introducir el motor previsto inicialmente para 2022 antes de decidir su retirada. El intenso duelo con Mercedes y Lewis Hamilton y el título de Max Verstappen pusieron en evidencia el tremendo impacto de su éxito. Después del sufrimiento de los primeros años con McLaren, Honda había logrado lo que parecía imposible en la era híbrida. Paralelamente, la Fórmula 1 estaba ya experimentando en todo el mundo una explosión de popularidad. Estados Unidos iba a contar con un tres grandes premios. Honda no quería perder el contacto con la Fórmula 1 ni sus réditos tecnológicos y permanecieron con Red Bull como suministrador de motores extraoficial. Además, el nuevo reglamento de 2026 asomaba por el horizonte, y recogía las demandas de todos los fabricantes presentes en la Fórmula 1. Honda también participó en el proceso de elaboración del mismo. Audi y Porsche se querían unir a la fiesta, porque las especificaciones técnicas del nuevo motor iban como anillo al dedo a la industria. Honda no quería abandonarla.
El adiós de Honda hizo que Red Bull decidiera fabricar sus motores
Sin embargo, la despedida de Honda despertó a Red Bull, cuyos responsables entendieron que debían ser dueños de su destino, es decir, fabricar sus propios motores. Crearon Red Bull Powertrains y Honda quedó fuera de juego. Porsche entró en escena, pero finalmente no llegó a un acuerdo con Red Bull. Pero no había vuelta atrás con el equipo austríaco, que no quería más sorpresas. Honda tenía que encontrar un socio para no perder su posición en la Fórmula 1, y el error de cálculo de Porsche era el mejor ejemplo. Empezó a negociar a principios de este año con Aston Martin. Por distintas razones, se trataba del socio perfecto, un matrimonio condenado a entenderse. El jueves pasado se prometieron oficialmente.
«El factor clave más importante en esta decisión para nosotros ha sido la dirección hacia la que se dirigen las nuevas reglas de 2026, que se están moviendo hacia la neutralidad de carbono. Y esa dirección coincidía con el objetivo de nuestra empresa de avanzar hacia el futuro” explicaba en la presentación del acuerdo el responsable de Honda Racing Corporation, Koji Watanabe. “Es el factor clave decisivo. Actualmente, la energía eléctrica representa el 20% o menos (en los motores actuales), a diferencia del motor de combustión interna, pero el nuevo reglamento requiere alrededor del 50%, lo que avanzaría aún más hacia la electrificación”.
Un segundo factor técnico terminaba por convencer a Honda: los combustibles sintéticos, “lo que nos obligará a ir 100% hacia el combustible neutro en carbono. Esto requeriría que pensemos en cómo integrar el nuevo combustible con el motor de combustión interna. También tendríamos que pensar en cómo optimizar la eficiencia. Esta dirección coincide con la dirección de Honda» remachaba Watanabe.
Para Aston Martin, el acuerdo con Honda es un pilar estratégico
En el caso de Aston Martin, el acuerdo con Honda supone uno de los pilares estratégicamente más importantes del proyecto que está construyendo en la Fórmula 1. Martin Withmarsh, CEO de Aston Martin Performace Technologies y del equipo de Fórmula 1 fue el artífice de la vuelta de Honda a la Fórmula 1 con McLaren y la tecnología híbrida. Ha repetido el doblete, ahora con Aston Martin.
“Tenemos que ser claros: Mercedes ha sido un gran socio para el equipo. Y lo siguen siendo. Están aquí para ganar, pero nosotros estamos aquí para ganar también. Entonces, en última instancia, hay cierta incompatibilidad en estas dos misiones. Y por eso hemos tomado la decisión”. La misma que McLaren pretendió en su día cuando también cambió Mercedes por Honda. “La naturaleza de la Formula 1 es que, si quieres ganar, significa vencer a Mercedes, pero es extremadamente difícil vencer a una organización tan buena si dependes de ellos en cuanto a propiedad intelectual, instalaciones y componentes”. Unidades de potencia, caja de cambios, suspensiones traseras… Para su propio proyecto ganador, solo cabe ser absolutamente independiente con tecnología propia que marque diferencias. La unidad de potencia es el factor crucial.
Aston Martin entra así en la órbita de los equipos dueños de su destino, el gran objetivo de Lawrence Stroll, ya que el trabajo directo como equipo oficial de un fabricante permite la integración de propulsor y chasis (como Mercedes, Ferrari, Alpine y Audi en el futuro), factor clave para aspirar a la victoria y los títulos, y a diferencia de la condición de cliente dependiente. “Será uno de los mejores equipos de la Fórmula 1”, presumía el propio Lawrence Stroll en Japón al anunciar el acuerdo.
Para Aston Martin, la asociación con Honda permitirá colocar la clave de bóveda del ambicioso proyecto emprendido por Stroll. Los responsables de Honda reconocían que habían quedado impresionados por la determinación de Stroll para conseguir la victoria a toda costa. Terminaron de quedar convencidos tras su visita a las nuevas instalaciones de Silverstone. Fichajes de personal (Withmarsh, Dan Fallows como responsable técnico además de otros muchos ingenieros) la gran inversión en la nueva sede que se inaugura ahora en mayo, el túnel de viento que entrará en funcionamiento el próximo año (hasta ahora también se comparte con Mercedes el del fabricante alemán). La llegada de Honda pondrá el gran lazo al proyecto. Y como un singular nexo de unión, de nuevo, la presencia de Fernando Alonso si siguiera en activo en 2026, con 44 años.
“La selección de pilotos depende del equipo. Si decide que volvamos a tener a Alonso como piloto, no tendremos objeciones de ningún tipo para que lo haga» anunciaba Watanabe como declaración de principios al presentar el proyecto, enterrando oficialmente el pasado por parte de Honda. Olvidada queda así la borrascosa época de McLaren, simbolizada en aquel famoso “GP2 engine” de Alonso en el Gran Premio de Japón de 2017. “Es un genio, le respetamos mucho”, sentenciaron desde Honda, conscientes del valor de Fernando Alonso, quien con su liderazgo y rendimientos está llevando a Aston Martin a una posición inesperada en 2023. A veces, la Fórmula 1 tiene una forma muy especial de cerrar sus círculos abiertos.
