Cuando hace unos dos años David Herranz me contó que preparaba un Raid que atravesaría España por caminos de tierra, pensé que sería muy difícil que el proyecto saliese adelante. Lo pensé yo y también un grupo de compañeros curtidos en mil batallas del Panda Raid que él mismo conoce bien porque participa en la organización. Nos parecía casi imposible conseguir los permisos y más que complicado diseñar un itinerario que de verdad atravesase la península ibérica sin apenas pisar el asfalto. Pero he de reconocer que nos equivocamos y que la perseverancia de David y su equipo ha sacado adelante un precioso proyecto que en esta su segunda edición ha conseguido una inscripción de nada menos que 117 equipos, en lo que ya es la única prueba de regularidad sobre tierra en vehículos clásicos que se realiza en nuestro país.
De Barcelona a Sevilla
La segunda edición de Spain Classic Raid ha tenido como finales de etapa algunos de los lugares más bellos de España; no olvidemos que el turismo y la cultura son algunos de sus alicientes, además del espíritu de compañerismo y la aventura. La salida se realizó en el Puerto Olímpico de Barcelona y la meta del primer día en la Seu Vella de Lérida. El segundo día se terminó en Expo 2008 de Zaragoza dentro del programa de fiestas de El Pilar 2016, el tercer día Guadalajara y el cuarto, mitad de prueba, en la plaza de toros de Las Ventas de la capital. La segunda parte ha tenido como finales de etapa Linares, Almería, la playa de La Herradura y la meta final en la Plaza de España de Sevilla, donde se realizó la entrega de trofeos.
Con participantes holandeses, italianos, suizos, rumanos y españoles de casi todas las comunidades, esta segunda edición ha sido todo un éxito, tanto por participación como por diversión ya que los propietarios de los coches han tenido que batallar día a día contra el barro, la niebla y un sinfín de obstáculos que, con ayuda del resto de participantes, lograban superar en su mayoría.
El Spain Raid Classic es una prueba que se disfruta desde el minuto uno. Ya sea por el recorrido, 2.300 kilómetros atravesando los desiertos de Los Monegros y Almería, la estepa castellana y varios parques nacionales y naturales. O por la variedad de los coches participantes, una vistosísima representación del mercado español de los años 70 y 80 encarnado por los utilitarios más populares como los Renault 4, 5, 6 y 12, Citroën Visa, Peugeot 205, Ford Fiesta y Orión, Fiat Panda 4X4 o Seat Marbella, el más habitual por precio, mantenimiento y diversión y con el que se apuntaron nada menos que 16 equipos. Pero había otros inscritos que dieron cache a la prueba y que ni se nos habría pasado por la cabeza ver en un raid de estas características, como el Volvo P1800 de 1966 de un equipo de Cantabria. Su propietario tiene una colección de todos los coupé de la marca sueca y con esta joya, que compró hace 15 años en Alemania, quiere participar el año que viene en el París-Pekín para coches de más de 50 años. El Spain Raid Classic le ha servido de experiencia y de entrenamiento.
Coches de todo tipo
También participaba un Porsche 944 comprado de forma específica para correr este Raid. Con los bajos totalmente forrados de acero inoxidable y ruedas Fedima como única preparación, el 944 ha cubierto la totalidad del Raid aunque no han faltado problemas de calentamiento en el modesto motor de 170 caballos debida a la poca refrigeración inferior. El consumo medio de este modelo durante el Raid ha sido de 13 l/100 km, un consumo muy ajustado ya que en muchos tramos ser abusaba mucho de las marchas cortas. El Spain Classic Raid también contaba entre sus inscritos, con participantes que habían hecho un Dakar o un Montercarlo Histórico, con un Renault 4L 4×4, el único homologado en España con un kit Rofman adquirido en Francia. Miguel Angel y Raquel, propietarios de este ejemplar que ya ha ganado algún que otro Raid en Marruecos, se han gastado en el coche 12.000 euros, pero hay que decir que se trata de un vehículo eficaz e imponente. Aunque contra todo pronóstico el súper 4 latas rompió un palier trasero en Los Monegros y otro llegando a Sevilla, ya muy cerca del final y tuvo que volver a Zaragoza en grúa.
Sorpredente ver también un Peugeot 204, un VW Kubel del 75, o un DAF 55 conducido por un equipo holandés residente en… Villanueva del Trabuco!!!. Y por supuesto sorpresa del equipo ganador, un Renault 4 furgoneta que se impuso al resto de inscritos, muchos de ellos en teoría con monturas muy superiores.
En el Spain Classic Raid las anécdotas no han faltado. Que le pregunten si no a los que se perdieron en un poblado chabolista de Torrejón y tuvieron que llamar a la policía, o a los del 4L que vieron como una rama les atravesaba el depósito de gasolina. Varias juntas de culata de coches sin preparación alguna sometidos a un esfuerzo extra, muchos amortiguadores y protecciones de carter reventados, pinchazos, palieres, embragues? e incluso motores. Pero nada que los participantes no esperaran ante unos recorridos que por momentos pasaban de un relajado paseo admirando el paisaje al tramo más radical. Como los que pillaron los más rezagados con una lluvia torrencial y barro para aburrir entre olivos llegando a Sevilla. Curioso también uno de los tramos en el que recorrimos 50 de los 70 kilómetros preparados para un AVE entre Sevilla y Granada que nunca se llegó a terminar. Una interminable pista de grava con sus apeaderos, sus arquetas y sus puentes. Un trabajo de años y muchos millones de todos a la basura para nada.
En el Spain Classic Raid todos disfrutamos cada minuto de una España muy poco conocida que se esconde entre caminos que nunca nos plantearíamos recorrer en solitario. Para los que no llegaron a esta, Spain Classic Raid, que cuenta con el patrocinio de Bosch y la colaboración de Bosch, Galp y Mitsubishi, se volverá a realizar entre el 25 de marzo y el 1 de abril del próximo año.
Para más información se pueden visitar las páginas web www.spainclassicraid.com y www.facebook.com/spainclassicraid
