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Excursión con Porsche hasta la estación de carga rápida del ‘fin del mundo’

Con temperaturas gélidas y un horizonte cubierto de nieve, un grupo de ocho personas se embarca en un viaje hacia el extremo norte de Europa. Desde Kiruna, en Suecia, parten a bordo de dos Porsche Macan con tracción integral y dos Porsche Taycan Cross Turismo, con la misión de llegar hasta Mehamn, un pequeño pueblo pesquero en la costa del mar de Barents. No es solo un destino remoto, sino el hogar de la estación de carga rápida más septentrional del mundo.

1.500 km de paisajes árticos con Porsche

Porsche alcanza la estación de carga rápida más septentrional del mundo.
Foto: Porsche.

El Porsche Communication Management (PCM) señala una ruta de aproximadamente 1.500 kilómetros, atravesando paisajes árticos y carreteras desafiantes. En Kiruna, ubicado 200 kilómetros al norte del Círculo Polar Ártico, la caravana de vehículos eléctricos se reúne antes de emprender la travesía. Este viaje es una prueba más de la capacidad de los coches eléctricos de Porsche para cubrir largas distancias de forma eficiente y confortable, incluso en condiciones extremas.

Desde su lanzamiento, el Posche Taycan ha sido protagonista de múltiples expediciones que han llevado la movilidad eléctrica a nuevos horizontes: desde Australia hasta Turquía, pasando por India y diversas rutas europeas. Sin embargo, este trayecto, con su clima adverso y carreteras heladas, representa un reto único. La meta es alcanzar la península de Nordkinn, el punto más septentrional de la Europa continental, donde la infraestructura de carga se enfrenta a temperaturas que pueden descender drásticamente.

Porsche Macan y Taycan en condiciones extremas

Porsche alcanza la estación de carga rápida más septentrional del mundo.
Foto: Porsche.

Cuatro vehículos eléctricos avanzan hacia el amanecer del Ártico. Tanto los Porsche Macan (aquí la primera prueba) como los Porsche Taycan Cross Turismo, equipados con tracción total, demuestran su capacidad para afrontar carreteras cubiertas de nieve y hielo. Con una diferencia de hasta 35 grados centígrados entre el exterior y el interior de los coches, los ocupantes disfrutan de un viaje cómodo, sin necesidad de comprometer el uso de la calefacción.

La planificación de la carga está a cargo del Porsche Charging Planner, integrado de serie en ambos modelos. Este sistema calcula de manera eficiente dónde y cuándo detenerse para recargar. Sorprendentemente, la travesía a través de Suecia y parte de Finlandia se realiza sin necesidad de una recarga inicial. La primera parada está programada en Kautokeino, ya dentro de Noruega, a tan solo 40 kilómetros del extremo norte del país.

Buena infraestructura eléctrica

Escandinavia se distingue por su avanzada infraestructura para vehículos eléctricos, y Kautokeino no es la excepción. Allí, la caravana encuentra estaciones de carga rápida en medio de un paisaje invernal imponente. Tras un breve descanso para un café y un cambio de conductor, los Porsche retoman la ruta hacia Lakselv, donde una nueva estación IONITY con seis puntos de carga les espera. En coincidencia con el Martes de Carnaval, el grupo aprovecha para disfrutar de los tradicionales bollos noruegos en un acogedor café cercano.

Porsche alcanza la estación de carga rápida más septentrional del mundo.
Foto: Porsche.

A medida que el viaje continúa, la ruta se torna aún más espectacular. La FV888, una de las carreteras más impresionantes de Europa, serpentea entre fiordos y montañas en los últimos 101 kilómetros del trayecto.

Sin embargo, las condiciones del asfalto son complicadas: la combinación de nieve, hielo y temperaturas en descenso convierte el camino en un desafío adicional. A pesar de no contar con neumáticos de clavos, habituales en la región, los Porsche mantienen un rendimiento impecable, demostrando su estabilidad y tracción.

Los cargadores más septentrionales del mundo

Finalmente, tras horas de conducción en un entorno hostil pero fascinante, el destino aparece en el horizonte. En Mehamn, junto a las oscuras aguas del mar de Barents, la estación de carga Kople recibe a los viajeros con postes de hasta 175 kW. Mientras los coches se recargan, el grupo se dirige al Nordic Safari Hotel, donde el chef Kolbjørn Kristoffersen ultima una cena protagonizada por cangrejo real, capturado esa misma jornada. Es el cierre perfecto para un día intenso de conducción en condiciones extremas.

Al día siguiente, la travesía continúa en dirección inversa, desandando los 750 kilómetros recorridos el día anterior. “Hemos demostrado, una vez más, que la movilidad eléctrica es completamente viable en el día a día, incluso en invierno en el Ártico”, comenta Mayk Wienkötter, portavoz de Porsche para los modelos Panamera y Taycan. “Esta aventura marca la primera vez que combinamos el Macan y el Taycan en un desafío como este, y ambos han superado nuestras expectativas”, concluye.

Los números de los Porsche en la travesía

Porsche alcanza la estación de carga rápida más septentrional del mundo.
Foto: Porsche.

Con temperaturas gélidas, los deportivos eléctricos han mostrado una autonomía real de aproximadamente 380 kilómetros, con un consumo medio de 25 kWh por cada 100 km. La avanzada gestión térmica de Porsche, incluyendo su eficiente bomba de calor, ha permitido mantener la calefacción encendida sin afectar el rendimiento de las baterías. Además, las estaciones de carga han estado donde se esperaban, sin retrasos ni imprevistos.

Para los conductores, la experiencia ha sido más que un simple viaje: ha sido una demostración de que la electrificación no es un obstáculo, sino una oportunidad. “El recorrido fue fantástico, y las opciones de vuelo en esta zona no son las mejores”, añade Wienkötter. “Así que mañana haremos el viaje de regreso. Otros 750 kilómetros, 10 horas de conducción y dos paradas rápidas para cargar. Sin inconvenientes”.

El frío extremo, las carreteras resbaladizas y la inmensidad del Ártico han puesto a prueba a los vehículos de la marca alemana, que han respondido con la eficiencia y el rendimiento que caracterizan a la marca. La movilidad eléctrica sigue avanzando, incluso en los lugares más inhóspitos del planeta.