BMW es una de las marcas actuales que antes han apostado por la electromovilidad. La conexión eléctrica en la marca bávara está marcada por un largo recorrido. Así, ahora, conducimos un BMW eléctrico de quinta generación, representada por dos modelos en estos momentos, el iX y el i4. Dos baluartes fundamentales en la nueva era de la marca. Con el objetivo puesto en 2030, cuando la mitad de las ventas en BMW deberán ser exclusivamente modelos eléctricos.
9Poco más de media hora
Con una batería de 76,6 kWh (71 útiles), el xDrive40 se puede cargar hasta un máximo de 150 kW en corriente continua. Con ello, en un punto de recarga rápido invertiremos 35 minutos para alcanzar el 80 por ciento de la batería, pagando en torno a los 80 euros. Bajaremos el precio en cargadores de 50 kW a la mitad, pero pasaremos de la hora y media en el tiempo de recarga.
Si introducimos en el navegador se la estación seleccionada, el iX se encargará de regular la temperatura de la batería. De esta forma la conexión se realizará en las mejores condiciones por rapidez.
En corriente alterna, lo que le da sentido a un eléctrico en el día a día, el BMW iX admite un máximo de 11 kW, con el cable embarcado disponible. Un punto de carga doméstico tipo wallbox optimizado, en el que invertiremos 7 horas y 15 minutos para alcanzar el cien por cien de la batería. Esta dispone de una garantía de 8 años o 160.000 kilómetros.