Lexus llega con el LBX a un segmento de modelos marcados por la distinción y el refinamiento. Marcas con una clara apuesta por el lujo ya que todas tienen –u optan a conseguirlo- el apellido Premium. Claro que la firma japonesa es, posiblemente, la que mejor trabaja ese territorio de experiencias y sensaciones, de distinción y refinamiento.
Lexus siempre ha trabajado la exclusividad como uno de sus valores diferenciales y en este caso, aunque llegue a uno de los segmentos más populares aunque sea del segmento Premium, no va a dejar de hacerlo, de intentar distinguirse. En este caso, con el LBX, la distinción es completa cuando nos fijamos en el sistema de propulsión. Porque no hay rival del Lexus LBX que apueste para la tecnología híbrida autorrecargable como hace el modelo de la marca de lujo del grupo Toyota.
Y eso, teniendo en cuenta la experiencia de la marca con este tipo de tecnología, es un valor añadido muy importante no solo para distinguirse de los demás; también para ofrecer la máxima eficiencia en el uso diario. Estas son las características con las que el Lexus LBX se va a enfrentar a un grupo de rivales que ponen todos en juego la distinción y el refinamiento.
4DS3
La marca más exclusiva del Grupo Stellantis ofrece un SUV de estilo distinguido y un aire diferente a lo que se puede ver en el mercado. Por dimensiones está un poco por debajo del Lexus, pues mide 4,11 metros de largo y su maletero alcanza los 350 litros de capacidad. Y su gama mecánica es más amplia con versiones diésel y de gasolina sin ningún tipo de electrificación o un eléctrico cien por cien, el DS 3 E-Tense que suma las ventajas de la etiqueta 0. Con potencias entre 110 y 156 caballos, solo se ofrece con tracción delantera. Y sus precios van de los 27.000 a los 42.000 euros.
