El fabricante de vehículos eléctricos español Silence dejará Cataluña si no recibe una pronta respuesta a su petición de asignación de un solar en la Zona Franca de Barcelona. Silence optaba a ocupar parte de los terrenos ocupados hasta la fecha por Nissan.
Es la segunda ocasión en la que los dirigentes de la marca advierten de la posibilidad de que Silence dejará Cataluña si no puede fabricar en Zona Franca. “No tenemos más tiempo. No podemos esperar mas”, comenta Carlos Sotelo, CEO de Silence.
No es el único
Silence dejará Cataluña siguiendo el camino ya marcado por Volta Trucks. El fabricante sueco de camiones eléctricos, ya ha renunciado a producir sus vehículos en España. La razón ha sido igualmente el fuerte retraso acumulado en la adjudicación de las instalaciones que Nissan ha dejado libres en la Zona Franca del puerto de Barcelona.
Si la comisión que gestiona la reindustrialización de la ex-factoría de Nissan no actúa pronto Silence dejará Cataluña. La marca ya maneja otras cuatro posibles ubicaciones para su planta, algunas de las cuales se encuentran fuera de terrritorio catalán.
Silence necesita aprovechar la ventaja adquirida en el mercado frente a otros fabricantes (tanto nacionales como internacionales). Para ello preciso contar cuanto antes con una mayor capacidad de producción de sus productos. Sus actuales instalaciones en Sant Boi del Llobregat se han quedado pequeñas.
El fabricante español aspira a ocupar alguna de las antiguas instalaciones que Nissan ha dejado atrás en la Zona Franca del puerto de Barcelona. Los retrasos de la gestión de la comisión que debe concretar su adjudicación ponen en riesgo el de futuro de Silence.
Dos nuevas líneas de producción
El fabricante español quiere crear dos nuevas líneas de producción para afrontar la fabricación de 25.000 motos eléctricas, 40.000 cuadraciclos eléctricos y 120.000 baterías. Con ello espera hacer frente a las necesidades de sus actuales planes de expansión comercial.
Silence tiene prevista una inversión superior a los 30 millones de euros para acompañar la demanda y fuerte crecimiento comercial de sus productos. Para ello precisa disponer de una capacidad de producción suficiente para cumplir con sus expectativas de futuro.
La marca de vehículos eléctricos no está sóla. Cuenta con el apoyo de importantes empresas, como Acciona, su principal accionista, o Seat, con quien mantiene importantes acuerdos comerciales. Silence produce para Seat los scooters eléctricos que esta comercializa bajo su marca de movilidad eléctrica Mò.
Microcoches eléctricos
Entre los proyectos de Silence está la comercialización de cuadraciclos eléctricos. El primero de ellos sería el SO4, su primer coche eléctrico para cuya producción ya ha adquirido toda la maquinaria y equipo industrial que precisa.
Silence espera un elevado potencial de ventas, dado que Seat podría estar interesado en comercializarlo bajo su marca de movilidad eléctrica Mò. Por otra parte, prevé cuadruplicar sus ventas de scooters gracias al nuevo servicio de suscripción de uso mediante el alquiler de baterías que acaba de presentar.
El fabricante de vehículos eléctricos acaba de iniciar la implantación de una red de Battery Stations a través de la cual los usuarios de sus motocicletas pueden intercambiar su batería sin carga por otra ya cargada en cuestión de segundos.
Scooters desde 2.750 euros
El sistema es la base de su nuevo servicio de suscripción. Este facilita la compra de su scooter eléctrico SO1 (5.150 euros, plan MOVES III incluido) a un precio de 2.750 euros (MOVES III incluido), 1.000 euros inferior al de un scooter gasolina equivalente.
Con la suscripción, el cliente adquiere un Silence SO1 y añade por 15 euros al mes el Batery as a Service (BaaS), un servicio mediante el cual pueden reemplazar la batería sin carga por otra ya cargada para continuar su viaje en la red de battery station que Silence ya está implantando en sus sedes, estaciones de servicio, aparcamientos, etc.
