Tesla, Waymo, Cruise,… la conducción autónoma y los servicios dependientes de esta cada vez están más presentes en la movilidad diaria y se posicionan como las innovaciones más disruptivas en la sociedad de cara al previsible futuro más cercano, al menos en cuanto a la forma que tenemos de desplazarnos por la ciudad. Pero en su aplicación y puesta en marcha ya están surgiendo las voces que reclaman la presencia e ”importancia innegociable del factor humano” en el desempeño de dichos servicios.
Y es que, a pesar de los avances recientes que se vienen produciendo en la industria del transporte autónomo, también hay empresas que mantienen firmes su visión y convicción de que la atención personalizada a los clientes y la seguridad que ofrece un conductor profesional al volante del vehículo resulta esencial para los clientes que solicitan los servicios, especialmente cuando el entorno son las corporaciones o empresas.
Aunque la tecnología de conducción autónoma ha evolucionado, esta aún no alcanza los niveles de fiabilidad y seguridad que los clientes esperan y confían en poder recibir con su implantación, y menos aún en materia de puntualidad, flexibilidad y capacidad de reacción ante posibles imprevistos, reacciones que son esenciales para la prestación de dichos servicios y ante las cuales la experiencia y el necesario criterio humano aplicable se antoja, al menos de momento, insustituible frente a la acción de las máquinas.
70% prefiere seguir con el control humano
De esta forma, no es de extrañar que, según estudios recientes como el llevado a cabo por la consultora Deloitte, muestren que más del 70 % de los consumidores aún prefieran disponer de control humano sobre los sistemas automatizados, un dato que viene a demostrar la desconfianza que la tecnología de conducción autónoma aún genera, especialmente ante situaciones de tráfico que se antojan impredecibles.
Conducción autónoma: persiste el escepticismo
Desde la compañía española JoinUp, especializada en la prestación de servicios de movilidad terrestre para empresas se considera igualmente que parte del esceptimismo que persiste en la población con respecto a la conducción autónoma y los servicios derivados de esta viene dado igualmente por la cobertura mediática que se da a los distintos incidentes que se vienen produciendo con el uso de distintos vehículos autónomos en la vida real.
La visión que sobre ellos proporcionan los medios de comunicación no ha hecho sino acentuar la percepción en la sociedad de que los servicios de transporte y movilidad desarrollados mediante conducción autónoma aún no son totalmente seguros, lo que supone un importante freno para su implantación y uso, al menos por el momento.
Actualmente, y pese a las implementación de medidas específicas y el desarrollo de numerosas pruebas controladas de todo tipo, los vehículos autónomos aún no aportan la necesaria flexibilidad ni la personalización en la prestación de sus servicios que los clientes, especialmente en el caso de las corporaciones y empresas, demandan.
El componente humano, imprescindible
Desde JoinUp se defiende que, pese a la cada vez mayor transparencia tecnológica existente aplicada a este tipo de vehículos, el componente humano sigue resultando imprescindible en la prestación de este tipo de servicios, hasta el punto de resultar esencial para garantizar transporte corporativo con total seguridad. Los clientes no sólo quieren ser trasladados de un punto A a uno B, sino recibir una experiencia integral, personalizada y adaptada y adaptable a cualquier circunstancia que pueda surgir durante la prestación del mismo.
La empresa de servicios de transporte corporativo JoinUp considera que los conductores no sólo proporcionan una mayor seguridad a los traslados que se realizan para las empresas, también actúan como embajadores de confianza dispuestos a actuar en todo momento con rapidez y criterio, siempre en base a sus conocimientos y experiencia, ante cualquier imprevisto que surja durante el desplazamiento y solventarlo de la mejor manera posible siempre con el cliente y el servicio al mismo puesto en el foco.+
Seguridad,confianza y experiencia personalizada
Desde JoinUp se afirma que la flexibilidad y adaptabilidad que precisan los servicios de transporte corporativos no son posibles de alcanzar y replicar sólo mediante el uso de maquinas o de tecnología avanzada, y es que si bien “la tecnología es un pilar fundamental para nosotros —ha comentado Elena Peyró, CEO y confundadora de JoinUp—, creemos firmemente que el factor humano es insustituible. En Joinup, apostamos por una movilidad innovadora sin perder de vista lo que nuestros clientes realmente valoran: seguridad, confianza y una experiencia personalizada. Para nosotros, el futuro de la movilidad siempre tendrá un toque humano”.