La tradición de colocar un gran árbol de Navidad en la plaza de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano, se remonta a 1982, con el Papa Juan Pablo II. Se elige para ello un árbol centenario que proviene cada año de una región diferente y se instala en la conocida plaza. Su madera se utiliza posteriormente para fabricar juguetes que se regalan a niños en situación de vulnerabilidad.
Pero el transporte del enorme abeto de Navidad es una tarea que requiere de una gran precisión y logística, de la que este año se ha encargado la empresa italiana de transportes especiales Santoni Srl en un convoy especial capitaneado por un camión MAN TGS.
El árbol de Navidad elegido este año tiene 29 metros de altura y se trasladó desde la localidad de Ledro, situada en la provincia de Trentino, por lo que el transporte tuvo que recorrer 650 kilómetros hasta la plaza de San Pedro.
El convoy que transportó el árbol de Navidad medía 34 metros en total
El árbol procedente de los bosques del norte de Italia se escoge de entre los abetos destinados a ser talados conforme a estrictos criterios de sostenibilidad. Estos bosques poseen la certificación PEFC, que avala una gestión forestal sostenible, pero este año su tala no ha estado exenta de polémica, ya que los ecologistas recogieron 40.000 firmas pidiendo al Papa que ‘perdonara’ su tala.
Para transportar un árbol de Navidad de este magnífico tamaño, Santoni Srl tuvo que asegurarlo con redes y cuerdas y subirlo a un semirremolque que, unido a la tractora MAN TGS, sumaba una longitud total de 34 metros y una anchura de unos 3,5 metros, dimensiones que hicieron que el convoy tuviera que realizar la mayor parte del trayecto hasta Roma durante la noche, cuando el tráfico es menos intenso.
El camión elegido para transportar el abeto que luce desde primeros del pasado diciembre en la Plaza de San Pedro fue el MAN TGS 26.540 6×2/4, equipado con el nuevo motor D26 Euro 6e. El vehículo también incorpora la última generación de la caja de cambios automatizada MAN TipMatic, un retardador y una toma de fuerza para el sistema hidráulico especial diseñada a medida.
Otra característica de este vehículo es el acoplamiento de la quinta rueda, que puede ajustarse en posición longitudinal, lo que no solo permite combinarlo con diferentes tipos y longitudes de semirremolques, sino que también ayuda a distribuir mejor la carga por eje, fundamental con el tipo de carga que tuvo que trasladar hasta Roma.
Además, MAN también atendió a la solicitud especial de Santoni Srl de añadir dos anillas de carga en el travesaño delantero, bajo la rejilla del radiador, que se utilizaron para fijar las cuerdas y los cables de amarre del abeto de Navidad.
Santoni y su equipo se involucraron en este trabajo tan especial desde la tala del árbol hasta el transporte a Roma, pasando por la ayuda a los leñadores con una grúa de su propia empresa. «Como es lógico, quería ponerme al volante. Primero, porque yo había elegido personalmente este vehículo y, segundo, porque no era un transporte rutinario. Fue un gran alivio ver que todo salía bien, puesto que sentía el peso de la responsabilidad. Además, este éxito confirmó que había tomado la elección correcta del camión», explicó Santoni.
